La directora de Desarrollo Educativo del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), Zulma Morales, explicó ayer domingo que hasta el momento son cinco las familias afectadas por la desmatriculación en un colegio privado de Lambaré, donde un niño habría sido víctima de abuso sexual. Destacó que a fin de año se podría tomar una decisión contra la institución.

“En el marco de este seguimiento y monitoreo que estamos realizando a la institución, esto es un punto importante y a fin de año el señor ministro tendrá la potestad de accionar según crea conforme de acuerdo a las leyes. La institución educativa sigue dentro de un monitoreo”, dijo la directora en comunicación con la radio 1020 AM.

GARANTIZAR PROTECCIÓN DE LOS ALUMNOS

Sostuvo que el MEC debe garantizar la continuidad de los estudios de los alumnos y generar un estado de protección para ellos y recordó que ninguna situación puede estar por encima de un derecho constitucional, como el acceso a la educación.

Morales mencionó que continúa el plan de mejora que se estableció desde la primera intervención que va hasta el mes de diciembre. También se remitió una nota de carácter urgente a la institución educativa, solicitando un informe en el pedido de los casos de desmatriculación de los niños, que se habría dado supuestamente como represalia por las denuncias de abuso sexual.

“El martes tenemos una mesa de diálogo con los padres afectados, donde vamos a estar conversando con ellos sobre el contrato que firman con la institución educativa. Por más internacional que sea no puede sobrepasar a las leyes nacionales y las normativas vigentes del ente rector, que es el MEC”, agregó la directora.

REPRESALIA

Mediante un correo electrónico dirigido a algunos padres, el colegio privado de Lambaré notificó la decisión de no renovar la matrícula a algunos estudiantes para el año lectivo 2023. Los padres consideran como una clara represalia contra las manifestaciones realizas por un presunto caso de abuso sexual a un niño en la institución.