Con el aumento gradual de la actividad económica, el sector de servicios, uno de los rubros más afectados por la pandemia, registra mejores desempeños con el avance de la inmunización. Dicho sector, que incluye a los subsectores de telecomunicaciones y financiero, creció 16,3% interanual en el segundo trimestre del año.

Más allá del efecto estadístico por la baja base de comparación, se evidencia un incremento del 4% en comparación a los niveles de prepandemia, de acuerdo a los datos del Banco Central del Paraguay (BCP), en su reporte de Cuentas Nacionales Trimestrales.

Cabe señalar que dentro de los servicios se observa la recuperación de los restaurantes, hoteles, servicios a hogares y servicios a las empresas respecto a un bajo desempeño del 2020.

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La actividad prác­ticamente se ha estancado en los últimos 7 meses. Foto: Gentileza.

Servicios financieros

Excluyendo al comercio y servicios gubernamentales, los servicios generan 28,5% del Producto Interno Bruto (PIB). Por su parte, los créditos a servicios, servicios personales e intermediación financiera crecieron 6,8% interanual a agosto y representan en conjunto 8,6% de la cartera del sistema financiero, lo que señalaría que existe oportunidad para una mayor financiación al sector, aunque la percepción de riesgo permanecería aun elevada, según el análisis de la consultora local Mentu, de acuerdo a datos del BCP.

En líneas generales, el PIB trimestral registró una variación interanual positiva de 14,5% en el segundo trimestre del 2021 y con ese resultado acumuló un crecimiento de 6,9% al primer semestre del año.

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Desde el enfoque de la oferta, las actividades económicas con mayor incidencia positiva en el comportamiento interanual fueron los servicios, gran parte de la industria, la construcción y la ganadería. De forma contraria, tanto la agricultura como el componente de electricidad y agua atenuaron el crecimiento interanual del trimestre, señala el reporte de la banca matriz.

Desde la perspectiva del gasto, los componentes con mayor incidencia positiva fueron la formación bruta de capital, el consumo privado y el consumo del gobierno. No obstante, las exportaciones netas incidieron de forma negativa.

Preocupación

Por otro lado, el economista Carlos Fer­nández Valdovinos, expresi­dente del Banco Central del Paraguay (BCP), señaló que, en cuanto a la actividad men­sual, al ser comparado con el año anterior, la dinámica eco­nómica muestra un rebote significativo. “Pero en el mar­gen se observa una ralentiza­ción que empieza a preocupar. Luego de alcanzar el pico pre­pandemia, la actividad prác­ticamente se ha estancado en los últimos 7 meses”, comentó.

Aclaró que, en este contexto, los motores de crecimiento del 2022 se concentrarían (nuevamente) en el sector agrícola y en las binacionales. “La actividad debería ‘nor­malizarse’ en ambos sec­tores, luego del pobre des­empeño de ambos este año. Lógicamente, el clima será fundamental para ello”, espe­cificó.


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