El presidente francés, Emmanuel Macron, recriminó al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que hay “demasiadas pérdidas civiles” en Gaza y le recordó la “necesidad absoluta de distinguir entre los terroristas y la población”, anunció el Elíseo este domingo.

Sobre la situación en Cisjordania ocupada, el jefe de Estado francés dio parte a Netanyahu de “su gran preocupación por el aumento de la violencia contra los civiles palestinos” y le pidió actuar “para evitar que esa violencia se propague y mantener la calma”.

Macron también abordó ese asunto durante una conversación con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, ante el cual “condenó la violencia” cometida “contra los civiles palestinos” en Cisjordania, precisó la presidencia francesa. Asimismo, Emmanuel Macron también le “reiteró” a Netanyahu “la importancia de instaurar una tregua humanitaria inmediata que conduzca a un alto el fuego”.

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La guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás se desencadenó el 7 de octubre por el ataque sin precedentes perpetrado por los milicianos islamistas en suelo israelí, que dejó 1.200 muertos, principalmente civiles, según las autoridades israelíes.

En respuesta, Israel lanzó una ofensiva por tierra, mar y aire en la Franja de Gaza con el objetivo de “aniquilar” a Hamás, que ha causado al menos 13.000 muertos, incluyendo 5.500 niños, según el último balance del gobierno de Hamás.

La ministra israelí de Inteligencia, Gila Gamliel, pidió este domingo a la comunidad internacional “promover el reasentamiento voluntario” de los palestinos “fuera de la Franja de Gaza”, en lugar de “enviar dinero para reconstruir” el territorio, bombardeado sin descanso por Israel. En un texto publicado por el periódico Jerusalem Post, Gamliel, miembro del Likud, el partido del primer ministro Benjamin Netanyahu, propuso “promover el reasentamiento voluntario de palestinos de Gaza fuera de la Franja de Gaza por razones humanitarias”.

En el escrito, la ministra criticó a la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa). “En lugar de enviar dinero para reconstruir Gaza o para la fallida Unrwa, la comunidad internacional puede contribuir a financiar el reasentamiento y ayudar a los gazatíes a construir sus nuevas vidas en sus nuevos países de acogida”.

“Intentamos muchas soluciones distintas: retirada [de las colonias de la Franja de Gaza], enriquecimiento, gestión del conflicto y construcción de altos muros con la esperanza de mantener a los monstruos de Hamás fuera de Israel. Todas fracasaron”, prosiguió. “Sería una situación en la que todos saldrían ganando: los civiles de Gaza, que quieren una vida mejor, e Israel, tras esta terrible tragedia”, manifestó.

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Israel bombardea la Franja de Gaza desde el 7 de octubre, en respuesta al ataque perpetrado por Hamás contra su territorio, en el que los milicianos islamistas mataron a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron, junto a otros grupos armados, a unas 240 personas, según las autoridades israelíes.

Según el Ministerio de Salud de Hamás, que gobierna este territorio de 362 km2 desde 2007, 13.000 civiles murieron en los bombardeos, incluidos 5.500 niños. Según la ONU, más de dos tercios de los 2,4 millones de habitantes de la Franja han sido desplazados por la guerra.

El 80% de los gazatíes son refugiados o descendientes de refugiados que se vieron desplazados durante la “Nakba” (“catástrofe”, en árabe), el éxodo de 760.000 palestinos que huyeron o fueron expulsados de sus hogares durante la guerra de 1948 que dio paso a la creación del Estado de Israel.

Fuente: AFP.