Con un Bautista Merlini inspirado frente a Luqueño, Libertad trepó en forma solitaria a la cima de la tabla. El hábil jugador argentino disfruta tras un gran partido y del mejor momento desde que llegó a principios de año en el campamento albinegro. En contacto con Versus Radio por la 970 AM, contó que el virus del momento le afectó más de lo esperado y que por ese motivo no pudo recuperar el nivel que tuvo en Guaraní el año pasado.
“Me había agarrado covid-19 y me costó recuperarme. Me agarró en la primera semana y no pude hacer la pretemporada. Después me pegó bastante fuerte, me dejó una mancha en el pulmón, que ya se me fue. Me costó en lo físico, en el aire, en la fuerza. Con mucho trabajo, después volvés a sentirte bien”, explicó el jugador de 25 años. El lunes hizo el segundo partido completo en el Gumarelo y fue clave en el equipo. No se ahorró en elogios a la hora de describir los momentos desde su llegada al club. “Encontré un club muy ordenado, tenés mucha gente a disposición de los jugadores para que no les falte nada. Te tratan como a una familia. Tenemos todas las comodidades, eso también se nota a la hora de jugar. Te ayudan a tener una tranquilidad mental”, enfatizó.
Reconoció que entre el torneo Apertura y la Copa que se le viene en la fase 3 ante el Atlético Nacional de Colombia “es desgastante, pero tenemos un plantel de mucha jerarquía, tranquilamente podemos pelear los dos frentes. Nosotros apuntamos a llegar lo más alto en las dos competencias”, advirtió. “En las próximas fechas vamos a jugar contra rivales directos. Ante Guaraní será un partido especial, porque venimos de tener un lindo año con ellos, dejamos muchos amigos ahí”, se sinceró.
SE FUE FLORENTÍN
Gustavo Florentín renunció como técnico de Sol de América tras el último empate 2-2 frente a Guaireña. El equipo unicolor realiza una pésima campaña y no ha podido rectificar rumbos. Al inicio del torneo primeramente había cesado del cargo de entrenador a Celso Ayala. Anoche se confirmó el regreso de Éver Almeida.