China es el país anfitrión del Día Mundial del Medio Ambiente 2019, allí tienen lugar las celebraciones oficiales del 5 de junio. Pero el tema de la “Contaminación del aire” que se aborda este año desde las Naciones Unidas nos afecta a todos. En Paraguay, ¿cómo estamos? Según el “Tercer Diagnóstico sobre la Calidad del Aire”, presentado en marzo, la presencia de material particulado 2,5 en Asunción ha aumentado y lo que respiramos no es limpio.

La concentración promedio diario de MP2,5 en la ciudad de Asunción en 2018 fue igual a 30.0 [µg/m³]. Esto es aproximadamente un 20% más que la concentración promedio diario encontrada en el año 2010 y un 50% más que la encontrada en el año 2014, según el estudio que estuvo a cargo del Centro Mario Molina de Chile.

“En el Paraguay, desde el año 2014 contamos con la Ley N° 5211 DE Calidad del Aire, además el Ejecutivo promulgó el Decreto N°1269/2019, de la esta Ley que es el documento por el cual se reglamenta la Ley N° 5211/2014 de “Calidad del Aire a los efectos de su aplicación y coordinación interinstitucional definiendo funciones de las instituciones vinculadas a la competencia en la citada Ley, con el fin de alcanzar el desarrollo social, económico y ambiental como la calidad de vida de sus habitantes”, dijo el ministro del Ambiente y Desarrollo Sostenible, Ariel Oviedo.

Las cifras globales son alarmantes. Nueve de cada diez personas en todo el mundo están expuestas a niveles de contaminación que superan los niveles de seguridad señalados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Alrededor de 3.8 millones de muertes prematuras son causadas por la contaminación del aire interior de las casas cada año, la gran mayoría en países en desarrollo. Las emisiones del transporte se han relacionado con casi 400,000 muertes prematuras. El 24% de todos los gases de efecto invernadero emitidos en todo el mundo provienen del agro (la agricultura, la silvicultura y otros usos del suelo). Se estima que 40% de los residuos se quema al aire libre, un problema que resulta más grave en las regiones que se están urbanizando y en los países en desarrollo.

¿Qué podemos hacer al respecto, según ONU? Considerar los cambios en nuestro día a día para reducir la contaminación del aire que generamos en nuestra vida cotidiana. Eliminar de forma progresiva nuestra contribución individual al calentamiento global y, de este modo, detener sus perniciosos efectos en nuestra salud, y la del planeta.