Una mujer estadounidense de 37 años, amante de la caza, fue en los últimos días el epicentro de una tormenta de críticas y de un virulento repudio en redes sociales luego que se divulgaran fotos suyas con una presa que abatió en Sudáfrica el año pasado.
Las fotos de la discordia ya estaban en su cuenta de Facebook desde junio del 2017, pero pasaron al foco de las redes sociales después de que el medio sudafricano Africland Post compartiera en su cuenta de Twitter la foto de Tess Thompson Talley al lado de un ejemplar abatido de jirafa negra: “Una salvaje norteamericana blanca que es, en parte, neandertal viene a África y derriba una jirafa negra muy rara, cortesía de la estupidez de Sudáfrica.”
Si bien el post de Africland Post fue el pasado 16 de junio, la ola de indignación fue creciendo y hoy es global.
El post de la cazadora, quien vive en Kentucky, Texas (EUA), vinculaba el abatimiento de la jirafa a su gratitud a la voluntad divina: “Oraciones porque la presa de mis sueños se hizo realidad hoy. Obtuvimos 2.000 libras de carne de la gran jirafa macho.”
Las jirafas tienen una expectativa de vida de 22 años y la abatida por Thompson Talley se estima que tenía 18 años.
La mujer sería miembro de un grupo en Facebook – Hunters against PETA – que antagoniza con la citada organización de lucha en contra la crueldad hacia los animales.