POR PAUL RICARD
París, Francia. AFP.
Obesidad, desnutrición y cambio climático son las tres facetas de una misma amenaza para la humanidad, y es necesario combatirlas globalmente, aseguraron especialistas, para los cuales las multinacionales de la alimentación deben ser controladas como fueron las del tabaco.
Estos tres males “tienen motores comunes”, según los expertos: “potentes intereses comerciales, una respuesta política insuficiente y una falta de movilización de la sociedad civil”.
La prestigiosa revista médica británica publicó este lunes el informe de estos expertos, provenientes de la universidad de Auckland (Nueva Zelanda), de la universidad George Washington (Estados Unidos) y de la oenegé World Obesity Federation.
Este documento, que tiene un tono de compromiso, es la continuación de un primer estudio consagrado a la relación entre alimentación y medio ambiente, aparecido el 17 de enero también en The Lancet.
Preconiza dividir a la mitad el consumo mundial de carne roja y azúcar y duplicar la de frutas, legumbres y nueces.
Surgidos de trabajos de 43 expertos de 14 países, el nuevo informe es más profundo: “Estos 20 últimos años, obesidad, desnutrición y cambio climático fueron considerados de manera separada y la lentitud de las respuestas políticas es inaceptable”.
OBESIDAD Y DESNUTRICIÓN
“Estos tres fenómenos interactúan: el sistema alimentario no sólo es responsable de las pandemias de obesidad y desnutrición, sino que genera también entre el 25 y 30% de las emisiones de gases con efecto invernadero”, aseguran los especialistas.
Otra interacción: “nuestros sistemas de transporte dominados por automóviles favorecen un modo de vida sedentario (con muy poca actividad física) al mismo tiempo que generan de 14 a 25% de las emisiones de gases con efecto invernadero”.
Según el informe, el sistema de producción alimentario, las políticas agrícolas, los modos de transporte y la urbanización son por lo tanto los diferentes eslabones de una misma cadena, que estrangula a la humanidad.