Acompañada por sus padres y su hermano George, que estudia en el mismo centro, Charlotte, la hija de los Duques de Cambrige fue a su primer día de clases en la escuela Thomas’s Battersea.

La pequeña de cuatro años, ataviada con el uniforme del colegio y con el pelo recogido en una coleta, ha llegado muy sonriente de la mano de su madre. La simpatía y espontaneidad que la caracterizan se ha reflejado en su expresión y gestos ante los flashes, parece que en algún momento incluso quería esconderse tras su madre, de quien no se ha soltado en ningún momento. La Duquesa de Cambridge llevaba también la mochila con todo lo necesario para esta jornada, que también es la primera para su hermano George, que caminó igualmente cogiendo la mano de su padre. La escuela Thomas’s Battersea, ha sido calificada con sobresaliente por la oficina de Estándares en Educación del Reino Unido, educa a niños y niñas, de entre cuatro y trece años, en sus aulas.

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