Desafiante y hablando por primera vez desde que se abrió su mediático juicio a fines de noviembre, la socialité británica de 59 años subió al estrado solo para decir que no testificaría. “Su señoría, el gobierno no ha probado su caso más allá de toda duda razonable, por lo que no es necesario que testifique”, declaró Maxwell a la jueza de Nueva York, Alison Nathan.
Ghislaine Maxwell dijo el pasado viernes que los fiscales no habían podido probar su culpabilidad de delitos sexuales, mientras termina su defensa en un juicio donde se escucharon afirmaciones espeluznantes de que preparó a menores para el abuso de Jeffrey Epstein.
Lea más: Falleció Rolando Niella, creador de la marca Martel
La fiscal Maurene Comey dijo que las partes habían llegado a un consenso para claudicar el caso el viernes más tarde. La hija del exbarón de los periódicos Robert Maxwell enfrenta una sentencia de cadena perpetua efectiva si el jurado la declara culpable de seis cargos por tentar y transportar a menores para tener relaciones sexuales con el fallecido magnate Epstein, su pareja de toda la vida.
La acusación terminó el viernes de la semana pasada, después de tomar solo 10 días para interrogar a sus testigos. Intentaron retratar a Maxwell como la cómplice de Epstein para reclutar niñas que eran explotadas sexualmente por el empresario estadounidense, quien se suicidó en la cárcel hace dos años mientras esperaba su propio juicio. Dos mujeres dijeron que tenían tan solo 14 años cuando Maxwell presuntamente comenzó a prepararlas y a hacer arreglos para que le dieran masajes a Epstein que terminaban en actividad sexual.
Una, identificada como “Jane”, detalló cómo Maxwell la reclutó en el campamento de verano y la hizo sentir “especial”. Recordó que los encuentros sexuales con Epstein se volvieron rutinarios, y que a veces Maxwell estaba presente. Otra, llamada “Carolyn”, dijo que por lo general le pagaban 300 dólares después de encuentros sexuales con Epstein, a menudo de la mano de la propia Maxwell. Los presuntos delitos habrían ocurrido entre 1994 y 2004.
‘Falsos recuerdos’
La defensa de Maxwell, que comenzó su caso el jueves, cuestionó la capacidad de las mujeres para recordar eventos de hace un cuarto de siglo. También mencionaron el supuesto abuso de drogas de dos de ellas. Sin embargo, después de indicar que planeaba llamar a 35 testigos, la defensa llamó solo a nueve al estrado en el primer día y medio, otros se retiraron, se retrasaron o no estuvieron disponibles.
Una jueza cada vez más exasperada les pidió el viernes temprano que presentaran los testigos prometidos o claudicaran sus casos. Entre los testigos de la defensa estaba la psicóloga Elizabeth Loftus, experta en “falsos recuerdos”, cuyo testimonio pretendía cuestionar los recuerdos de las cuatro presuntas víctimas en el caso.
Lea más: El recorrido con historia y sentimiento realizado por Nadia Ferreira en Israel
Otra testigo que se presentó el viernes fue Eva Andersson-Dubin, exmiss Suecia, que salió con Epstein entre 1983 y 1991 y siguió siendo amiga de él durante años. La exmodelo y esposa del destacado financiero Glenn Dubin leyó los registros de vuelo que mostraban que ella, su esposo y sus tres hijos volaban regularmente en los aviones privados de Epstein y pasaban vacaciones con frecuencia en su casa de Palm Beach, entre 1994 y 2004.
Dijo que nunca vio ninguna conducta inapropiada entre Epstein y mujeres adolescentes. Sin embargo, también admitió durante el contrainterrogatorio que tiene problemas de memoria debido a un posible “problema médico”. “Es muy difícil para mí recordar algo muy lejano y, a veces, ni siquiera puedo recordar cosas del mes pasado. Mi familia lo nota. Yo lo noto. Ha sido un problema”, admitió la mujer de 60 años a la fiscal Allison Moe.
Lea más: Se incendió el Crucero Paraguay encallado hace años en el bañado Tacumbú
La defensa también interrogó brevemente a dos agentes del FBI el viernes antes de llamar a Michelle Healy, exrecepcionista de Epstein. El caso debía concluir hacia el final del viernes después de que la defensa retiró las solicitudes para presentar a una testigo identificada como “Kelly”, y puso al propietario de un pub de Londres en el estrado.
El día anterior, la jueza Nathan había rechazado una solicitud de que se permitiera a tres testigos entregar declaraciones de forma anónima. También rechazó los intentos de la defensa por llamar al estrado a dos abogados como acusadores de Epstein. La fiscal Maurene Comey acusó a la defensa de tácticas dilatorias. “La defensa ha tenido una cantidad extraordinaria de tiempo para preparar su caso”, indicó.
Fuente: AFP.