Aunque algunos insectos parecen inofensivos, lo cierto es que pueden ser muy perjudiciales para las plantas. Por eso te compartimos algunos trucos prácticos para mantenerlos alejados.
Estos insectos son descendientes de las mariposas y las polillas, se alimentan de muchas especies diferentes y aunque viven como máximo 45 días, es un lapso de tiempo suficiente para causar estragos en las plantas. Las consecuencias van desde debilitar, enfermar y hasta matar a las plantas.
¿Cómo identificar las plagas?
Lo primero es la observación, es importante que al regar y cuidar de tus especies observes si tienen signos de “invasión”. Si hay orugas haciendo de las suyas en tu jardín vas a notar que las plantas tienen pequeños agujeros o mordidas en las hojas, los tallos se van a empezar a ver oscuros o pálidos alrededor de los daños, incluso algunas ramas podrían estar rotas o encontrar pequeñas bolitas negras, que en realidad son las heces de estos insectos.
¿Qué hacer para proteger tus plantas?
1. Plantas “escudo”: La naturaleza ofrece un sinfín de especies. Algunas de ellas desprenden un aroma que aleja a los insectos, además que te van a servir para tu consumo personal. En este caso podés incluir romero, kuratú, albahaca, salvia, menta, caléndula y ajo.
2. Atrae pajaritos: Además de darle alegría al hogar con su cantar, son excelentes aliadas para eliminar plagas porque se alimentan de ellas. La mejor manera de atraer pájaros es armando un espacio con comida y agua, también podés crear o comprar un nido para que se acomoden.
3. Remedios: Existen productos destinados para el control de plagas, pero también podes elegir algunos ingredientes que -probablemente- tengas en casa. Si combinas ajo en polvo, agua y jabón tendrás un tónico efectivo para esparcir y ahuyentarlas.
Otro remedio casero es la infusión de kuratú fresco. Herví algunas ramas de cilantro en la cantidad de agua que necesites. Dejá que se enfríe, colá y esparcí en el jardín.
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