Se sabe que dormir con el maquillaje es nocivo para la piel. Obstruye los poros, evita que la dermis se regenere y promueve el acné, pero poco se habla de cómo hacerlo correctamente y por eso te contamos a continuación.
Para empezar, es fundamental conocer el tipo de piel que una tiene, es decir, si es seca, mixta o grasa. Para eso es fundamental consultar con una especialista en dermatología que brinde esta información e indique cuáles son los mejores productos.
Si ya tenés en claro el punto anterior, evitá los siguientes errores:
1. Usar toallitas desmaquillantes
Muchas emplean estos productos porque son prácticos, pero lo cierto es que sólo debe usarse en situaciones específicas, por ejemplo, si se está de viaje. Las toallitas desmaquillantes no deben incluirse en la rutina diaria porque, por su material, tienen tendencia a irritar la piel, tampoco tienen suficiente producto para remover el maquillaje correctamente.
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En el caso que tengas que viajar durante horas, lo ideal sería que lleves en tu neceser una toallita reutilizable de microfibra y agua micelar, caso contrario, el último recurso deben ser las toallitas desmaquillantes.
2. Frotar con fuerza
Si el maquillaje no sale con facilidad es porque no se está empleando un producto adecuado o no se le da el tiempo suficiente para que haga efecto. Un error repetido es frotar el rostro y el contorno de ojos. Lo ideal es aplicar masajes y toquecitos ligeros, nunca ejercer presión.
3. No usar los productos adecuados
Cada zona tiene su propio producto, así como la crema de manos no es la misma que para el resto del cuerpo o el rostro, para desmaquillar sucede algo igual. El producto que se emplee en el rostro, sea de la fórmula que sea, debe ser distinto al que se use en el contorno de ojos, o en todo caso, se debe emplear un agua micelar que sea para esta zona y siempre tratar con suavidad.
4. Usar productos agresivos
Para desmaquillar y limpiar el rostro no se debe usar productos con partículas exfoliantes. Deben ser productos suaves que cuiden la piel del rostro.
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5. No lavarse el rostro luego de desmaquillar
Cuando se aplican los desmaquillantes puede parecer que estamos libres de residuos, pero lo cierto es que es el primer paso de la rutina. A esta siempre le debe seguir el lavado de cara con el producto acorde a tu tipo de piel.
6. Capa hidrolipídica
Siempre se remueve la barrera cutánea, por más suave que sea el producto que se emplee, incluso el agua de la canilla tiene este mismo efecto. Cuando esto sucede la piel tiende a generar más sebo o también se reseca. Para evitar esto, una vez desmaquillada y con el rostro limpio, hay que aplicar un tónico, y luego el resto de los productos de skin care.