Los Juegos Odesur ASU 2022 no paran de emocionar al público y una de las protagonistas que brilló en lo alto del podio fue Silvia Patiño, ganando el oro en la categoría Bikini Fitness de fisicoculturismo.
Por: Natalia Delgado
Se trata de una disciplina que se centra en el trabajo de la musculatura corporal, teniendo en cuenta las líneas estéticas y la exhibición en competencia. La preparación toma tiempo porque los resultados dependen del entrenamiento, la alimentación, el descanso y la disciplina, pero la historia de Silvia es algo diferente.
Se inició en el ámbito deportivo cuando tenía 13 años y su gran motivador fue su papá. “Él siempre fue muy activo, muy deportista. El ejemplo de mi papá me motivó. Él me llevó a entrenar, le debo mucho en el ejemplo. Lastimosamente falleció el año pasado por covid, una pena que no pudo ver este logro mío, pero realmente le dedico a él porque fue quien me motivó a iniciarme en el deporte”, dijo en conversación con VOS.
A lo largo de su vida equilibró sus responsabilidades con el deporte. “Hice muchos años gimnasio, luego entrené 5 años de crossfit, y ya venía pensando en la posibilidad de presentarme en bikini fitness, ‘probar suerte’ como se dice, hasta que me animé”, menciona.
La campeona cuenta que uno de sus pensamientos fue “ahora o nunca”. Ya tenía referencias de un preparador y no dudó en comunicarse con él. Desde ese momento y a menos de un mes de su primera competencia empezó el sueño.
“Tengo que ser sincera, mi preparación para bikini fitness, propiamente dicha para mi primera competencia, fue de 20 días aproximadamente. Yo venía del crossfit, un día le escribí a mi preparador, sabía que él era muy bueno, le pregunté que tal me veía para una competencia y directo me fui para decirle que quería competir. Al día siguiente empezamos, 18 a 20 días después fue mi primera competencia”, relata Patiño.
Al ser una mujer que siempre entrenó y tener bien en claro cuáles eran sus objetivos, la preparación física y nutricional no fue el desafío más grande de Silvia, pero sí hacer el “cambio de chip”, como ella misma lo describe.
“Tuve que aprender algo nuevo en muy poco tiempo. Si bien la preparación o el deporte en sí no lo eran, todo lo relativo a ser bikini fitness sí. Tuve que ver los datos, donde comprar los zapatos reglamentarios, etc., por suerte para eso tuve un muy buen asesor “.
Y agrega: “Estaba comprometida con mi meta. Si es que voy a hacer algo, si es que decido competir en bikini, voy a hacerlo bien. Siempre dije que iba para ganar, no en el sentido de estar segura, para nada, sino en el sentido de que iba a hacer todo lo posible, que iba a hacer al pie de la letra mi preparación, la alimentación, todo, y fue un gran sacrificio”.
Silvia aprendió en tiempo récord la manera de presentarse, realizar las pasadas individuales, las poses, y resalta que sigue trabajando en ello y mejorando en cada competencia. Su primera presentación fue en Ciudad del Este, una competencia para mujeres que recién estaban debutando en la modalidad Bikini Fitness y luego compitió en la categoría “Overall”, donde todas las ganadoras vuelven a presentarse y también se llevó el primer puesto, lo cual la sorprendió mucho.
“Al día siguiente tuve otra competencia en Coronel Oviedo, también gané y ahí ya estaba super motivada”, recuerda. Una semana después de estos resultados Patiño compitió en el Mister Paraguay, evento que le brindó el pase a los XII Juegos Suramericanos Odesur ASU 2022. De su debut en agosto de este año pasó a uno de los eventos más importantes.
Silvia no flaqueó en el objetivo, era todo o nada y remarca que esa fue siempre su mentalidad: ir por el oro. “Días atrás yo ya ponía: voy por todo, vamos por la medalla. Siempre dije que iba por eso, si se daba o no ya era otra cosa”, explica.
“El sentimiento es indescriptible, hasta ahora no asimilo y ya pasaron unos días, pero cuando dijeron que había ganado la medalla de oro dije: ‘Un sueño cumplido’. Pude darle una alegría a la gente, porque yo sé que todos anhelamos ese tipo de alegrías, que nuestra bandera esté en lo más alto, que se cante y retumbe nuestro himno. Entonces fue un gran orgullo y una emoción demasiado grande, tanto que no contuve las lágrimas y hasta ahora sigo llorando de emoción y felicidad”, confiesa Silvia.
Luego de tan grato resultado, la atleta viajó a São Paulo, Brasil, para otro torneo importante; planifica seguir compitiendo, dar lo mejor de sí y seguir dejando la bandera de Paraguay en lo más alto.
También nos deja un mensaje especial para los jóvenes: “No tengan miedo a hacer deporte, motivense porque es algo saludable. Instaurar buenos hábitos desde pequeños es clave, porque con los años es más fácil cuando ya se implementa y forma parte de vos, es difícil que abandones. Si bien se puede empezar a cualquier edad porque nunca es tarde, también creo que es importante que los padres les inculquen a sus hijos a iniciar en todo tipo de deportes. Deben encontrar lo que les gusta, motive y les haga feliz”.