Cuarenta años después, esta edición especial suena como lo mejor del trío rockero. Por su velocidad, podría ser el más rápido y descontrolado de todos, sin guantes ni cinturones.
Para celebrar el 40º aniversario de este cañón en el arsenal de Motörhead, se lanzaron nuevas ediciones de lujo: packs de libros de tapa dura en formatos de doble CD y triple LP con un martillo en forma de puño, el álbum original remasterizado, demos inéditos y un concierto completo emitido originalmente en Radio Clyde el 18 de marzo de 1982. Además, la historia del álbum y muchas fotos inéditas y una edición limitada del álbum original en azul y negro.
Si bien el álbum fue groseramente rechazado por la crítica en el momento de su lanzamiento, “Iron Fist” se revela como una instantánea vital de la banda en un período crucial en el que se encontraron atrapados en el tornado encendido por el éxito y, al más puro estilo Motörhead, se precipitaron hacia su siguiente fase a tal velocidad que trascendió la lógica o la razón para convertirse en el último viaje kamikaze de este trío.
En honor al 40º aniversario del álbum que inspiró esta pieza cinematográfica, el tráiler del nuevo Iron Fist ha sido redescubierto, digitalizado y publicado oficialmente para el disfrute del mundo. Originalmente cortado con la siniestra “Mars, The Bringer Of War” de Gustav Holst, ahora cuenta con el demo instrumental inédito “RipsawTeardown” como fondo sonoro.
Érase una vez el trío más ruidoso y veloz del planeta, los poderosos Motörhead, decidieron que necesitaban una película de presentación para salir al escenario y poder hacer la gira de su nuevo álbum Iron Fist. No se trata de un video promocional, ya que se trata de la formación de tres amigos: Lemmy, Fast Eddie Clarke y Phil “PhilthyAnimal” Taylor en 1982.
Lo que produjeron quedó confinado en VHS piratas: un cortometraje sangriento, brutal y exagerado, dirigido por Nick Mead, en el que se asesina a caballeros y se pone en peligro a doncellas. Rodado en un bosque de Hertfordshire, presenta a una banda medieval endurecida por la batalla que recorre un bosque oscuro, alimentada por el vodka y blandiendo armas, llevando cascos con cuernos y mostrando un aspecto feroz mientras golpean el aire con su “puño de hierro”.
Imagínese una pesadilla anfetamínica no saludable, de bajo presupuesto, y que sea una versión de Monty Python y el Santo Grial, y ya tiene la mitad del camino recorrido. Es eso lo que acompaña el lanzamiento de las ediciones del 40º aniversario del “Iron Fist”.