Cada una de estas personalidades recarga sus energías de diferentes maneras, conocerlas ayudará a que se pueda comprender cuándo tu pareja necesita de su tiempo a solas o cuando socializar y comunicarse al respecto.

Un introvertido suele ser alguien a quien le encanta pasar tiempo solo, o solo con su pareja o familia elegida. “Un introvertido no es ‘solo una persona tímida’. Más bien, una persona introvertida es simplemente una persona que se alimenta más del tiempo a solas que de centrar su atención en las reuniones sociales”, explica la PhD y psicóloga clínica Carla Manly, que se especializa en problemas de relaciones.

Mientras tanto, los extrovertidos tienden a sentirse más agotados cuando no tienen tiempo para socializar o ampliar su red interpersonal. La advertencia, por supuesto, es que tanto la introversión como la extroversión operan en una escala móvil, lo que significa que la mayoría de las personas son un poco de cada una y es importante recordar la realidad de este continuo para los propósitos de cohabitar con una persona que tiene preferencias diferentes a las suyas.

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Cómo los introvertidos y los extrovertidos pueden complementarse en las relaciones

Según la Dra. Manly y como explica para Good+Well, es poco probable que un extrovertido extremo y un introvertido extremo terminen en una relación duradera. Sus estilos de vida pueden simplemente chocar y, en última instancia, esto puede separarlos. Pero, ese no es el todo y el final de la situación.

“Si las parejas son moderadamente diferentes en la escala de introversión-extroversión, las diferencias en realidad pueden impulsar tanto la atracción como el crecimiento personal”, explica.

Y agrega: “Por ejemplo, un introvertido moderado que tiende hacia el lado solitario puede sentirse atraído por el lado alegre y sociable de un extrovertido moderado. El extrovertido, a su vez, puede sentirse atraído por el estilo más reflexivo y reservado del introvertido”.

Esencialmente, si vos y tu pareja son capaces de adaptarse a los intereses y necesidades del otro, es posible que simplemente se disfrute personalmente de cada una de esas actividades.

“El introvertido puede descubrir un nuevo placer en las actividades sociales que antes habría evitado”, dice la Dra. Manly. “De la misma manera, el extrovertido puede llegar a aprovechar los beneficios de un mayor tiempo de tranquilidad y participación en la sociedad”.

Tres maneras de mantener viva la mentalidad de “los opuestos se atraen”

Cuanto más se difieran en ese continuo introvertido-extrovertido, más tensión puede surgir una vez que vivan juntos, dice la Dra. Manly. Por lo tanto, anticipar estas diferencias y discutir cómo se trabajará con ellas antes de tiempo, puede ser esencial para su relación.

Porque, así está la cosa: si bien el desacuerdo ocasional sobre cómo pasar un sábado por la tarde no será un factor decisivo, estos argumentos pueden agravarse con el tiempo si no trabajan juntos en ellos. A continuación, tres consejos para evitar que esa situación tome forma.

1. Trabajar para entender de dónde viene tu pareja

Si está compartiendo la llave de una casa con alguien que es introvertido, asegúrese de preguntarle cómo se siente con los compromisos sociales. ¿Hay un cierto número de cenas de las cuales no pasar con los amigos en la semana? ¿Cuál es su forma favorita de recargar sus energías? ¿Cuántas horas al día necesita su tiempo?

“Dependiendo del nivel de introversión de un individuo, donde se encuentran en el continuo introversión-extraversión, ser social puede ser tremenda, moderada o extremadamente agotador”, resalta la Dra. Manly. “Cuanto más introvertida es una persona, más exigente psicológicamente será un evento social”.

Si te enfrentas al escenario opuesto, es decir, una pareja que tiene tendencias extrovertidas, háblale sobre por qué te sentís lleno de energía en una multitud y cuántas veces a la semana necesitas salir con amigos para sentirte realizado/recargado.


2. Hacer la tarea diaria de fortalecer tu músculo de inteligencia emocional

“Si tanto el introvertido como el extrovertido tienen una gran inteligencia emocional y habilidades de comunicación saludables, a menudo pueden sortear los obstáculos que se presenten”, dice la Dra. Manly.

Hay algunas maneras de mejorar sus habilidades de inteligencia emocional, que incluyen: escritura libre y diaria para entender los flujos y reflujos de sus emociones o adoptar una práctica de búsqueda del centro, como la meditación, que puede ayudarte a estar presente y consciente de las necesidades de tu pareja. Mirando las cosas a través de su perspectiva. Sabiendo lo que sabes ahora sobre cómo reciben energía, ¿cómo se sienten en este momento?

3.Pensar en la relación con una mentalidad orientada al crecimiento

Si constantemente pensas en tu relación en términos de lo que esa persona te obliga a hacer (como ir a una fiesta), o lo que te impide hacer (como faltar a la fiesta para quedarte y cocinar juntos), tu relación vendrá desde un lugar de resentimiento, no desd el respeto.

“Ser un poco disparejo en la escala de introversión-extroversión puede no ser un problema cuando los socios se comprometen a respetar las necesidades de los demás de una manera compasiva y colaborativa”, dice la Dra. Manly. “Especialmente para las parejas que están orientadas al crecimiento, las diferencias leves o moderadas en el continuo introversión-extroversión pueden verse como oportunidades para volverse más flexibles, conectados y solidarios”.

Con el tiempo, es posible que descubras que tu pareja introvertida te muestra cómo buscar energía e inspiración en actividades más tranquilas y autorreflexivas. Y viceversa: como introvertido, puedes descubrir que tu extrovertido te inspira a salir y, como resultado, haces conexiones nuevas y maravillosas. En otras palabras, crecen juntos y (eventualmente) se acercan cada vez más a un punto de equilibrio, señala la Dra. Manly.


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