Cuentan con propiedades que ayudan a proteger el hígado, bajar el colesterol y controlar el peso. Pocos saben de sus beneficios, de hecho, no son las favoritas en la cocina hasta el momento en que se las incluye intencionalmente. Te contamos todo lo bueno de esta hortaliza.

La planta de la berenjena, de nombre técnico solanum melongena, se destaca por ser hidratante y diurética, ya que el 90 por ciento de su contenido es agua. Además cuenta con pocas calorías y es rica en fibras, vitaminas y minerales.

Al igual que el agua, la fibra es el principal componente de esta hortaliza de tipo soluble, que favorece el buen estado de la flora bacteriana y disminuye la consistencia de las heces, lo que ayuda a su eliminación, y propicia el descenso de peso.

Es un alimento de propiedades beneficiosas sobre la digestión de los ácidos grasos, la presión arterial, la salud de los riñones y la resistencia a las enfermedades en general. Asimismo, protege el hígado y aporta antioxidantes que ayudan a eliminar el colesterol de otros alimentos.

La berenjena puede ser consumida de distintas formas, como por ejemplo: rellenas, al horno, a la plancha, fritas, en albóndigas, canelones, en láminas para la lasagna o para una ratatouille. Si estos diferentes platos te dieron una idea de cómo consumirlas, es hora que conozcas sus bondades para la salud.

Estos son sus principales beneficios:

Digestiva: Como es un alimento ligero y digestivo mejora el buen funcionamiento del organismo. Siempre y cuando se cocine de manera apropiada.

Baja el colesterol: La piel y las semillas cuentan con fibra y sustancias químicas que contribuyen a mantener el colesterol en niveles óptimos. Algunos compuestos de esta hortaliza inhiben la síntesis de colesterol en el hígado.

Controla el azúcar: Es recomendada para diabéticos porque contiene muy pocos hidratos de carbono, mucha fibra, que reduce la velocidad de absorción de los azúcares de otros alimentos, y sustancias que ayudan a mantenerlo bajo control, como la trigonelina.

Diurética: El mineral más abundante es el potasio y casi no contiene sodio, lo que favorece la eliminación de líquidos y reduce la presión arterial. Esto facilita el trabajo del corazón y apoya la función eliminadora de los riñones.

Antioxidante: Posee una decena de ácidos fenólicos antioxidantes muy potentes y antocianinas, que impiden la oxidación del colesterol, y así previene los trastornos cardiovasculares como las enfermedades degenerativas.