Una planta muy versátil, fácil de identificar por su aroma y sabor, y muy utilizada en el ámbito culinario. Sin embargo, sus propiedades no terminan ahí, también se le atribuyen muchas bondades en la medicina natural.
A simple vista es muy parecida al romero, pero se diferencian principalmente en el olor. Pertenece a la familia de las labiadas y es originaria de los países mediterráneos. Su fragancia es descripta como de tinte leñoso y crece en suelos secos y soleados, además de ser resistente en heladas y sequías.
En la antigüedad era usada por los egipcios para embalsamar, y los griegos la empleaban para realizar sus baños. Además de ser sabroso en los alimentos, posee múltiples nutrientes como: proteínas, calcio, sodio, potasio, fósforo, magnesio y selenio.
Por sus bondades medicinales se utiliza para tratar diferentes afecciones del cuerpo. Contiene timol y carvacrol, lo que la convierte en un antibiótico natural. Sus propiedades antipiréticas facilitan la digestión, previene los gases, las retenciones en el intestino, incrementa la secreción de bilis, combate los parásitos intestinales y estimula el apetito.
Posee propiedades antiinflamatorias, antiespasmódicas y analgésicas, ideal para aliviar los dolores menstruales. También evita los dolores de cabeza, la irritación estomacal y la retención de líquidos.
Es empleado para tratar afecciones respiratorias, expectorante y mucolítico, siendo ideal para mejorar la tos, los resfríos, la gripe y el catarro. Al ser rica en polifenoles -sustancia antioxidante- combate los radicales libres que deterioran las células previniendo el envejecimiento prematuro.
¿Cómo puedo usar el tomillo?
Se puede emplear fresco o seco en las comidas. Si querés probar aceite de tomillo en tus ensaladas, basta con poner una rama fresca dentro de una botella con aceite y dejar que suelte todas sus propiedades y aroma, cuando más tiempo pase, el sabor será más intenso.
Otra manera de consumirlo es preparando té o poniendo sus hojas secas en el mate. La infusión sirve como enjuague bucal, ya que elimina y previene la halitosis, sana llagas y úlceras, además que refresca el aliento. También sirve para desinflamar y tratar afecciones de la piel aplicando un poco del té tibio con ayuda de un algodón sobre la zona afectada.