La bicicleta fue creada originalmente como un medio de transporte en 1817 por un alemán llamado Karl Von Drais, que la bautizó como la “máquina corredora”. Desde entonces, fue evolucionando en sus formas, materiales y también, finalidad.
Muchas asociamos a la “bici” con la niñez; a ese momento inolvidable en el que aprendimos a pedalear y divertirnos en paseos interminables con la brisa cálida golpeándonos el rostro. En cambio otras personas, lo vinculan directamente al ejercicio físico. Independientemente de tu historia con la bici, ¿conocés todos los beneficios que en realidad tiene?
Además de ser un método de transporte “eco friendly”, nos facilita en menor tiempo, llegar a lugares no tan lejanos; su mantenimiento es muy accesible y una vez que lo adquirís, te olvidás de los gastos de transporte público.
A todo esta parte práctica de optar por él, que sin dudas es sumamente beneficiosa, también tenemos que sumarle los beneficios en cuanto a la salud mental y físico que nos brinda:
1. Estrés y ansiedad: Un paseo de 30 minutos escuchando tu música preferida te puede liberar de esas preocupaciones que se sienten como una mochila en la espalda. Esta actividad genera en nuestro cuerpo endorfinas y dopamina, hormonas responsables del placer y la felicidad.
2. Rendimiento cognitivo: La coordinación, atención y equilibrio son fundamentales para no caerse de la bicicleta. Al realizar estos ejercicios con frecuencia, el cerebro se ejercita y funciona mejor al momento de concentrarse e incluso, ser creativas.
3. Elasticidad muscular y articular: Es muy utilizado en ejercicios de rehabilitación, ya que el ciclismo mejora la estructura, función y estabilidad de ligamentos, tendones y articulaciones. También previene la osteoporosis.
4. Abdomen y espalda: Si pasas mucho tiempo sentada en la oficina, montar una bici te va a obligar a mantenerte erguida para tener mejor equilibrio y poder agarrar de manera segura el manubrio; esto tensa el músculo de la espalda y también trabaja los abdominales.
5. Fortalece el sistema inmune: Al repercutir en el gasto calórico, el estimulo muscular general del cuerpo, la oxigenación de los pulmones y producción de hormonas de felicidad y placer, da como resultado defensas más fuertes. Esto claro, siempre acompañado de una buena alimentación y estilo de vida.
Quizás ahora veas a la bicicleta a través de una nueva perspectiva ¿la vas a usar más a menudo?