Tal vez en algún momento escuchamos: “todo bien, 12-8″ y nos preguntamos qué quiso decir. Esa frase hace alusión a la presión arterial que se encuentra en el rango normal pero ¿cómo cuidar la presión arterial?
Cuando hablamos de presión arterial nos referimos a la fuerza que ejerce la sangre contra la pared de las arterias. Esta presión es fundamental para que circule la sangre por los vasos sanguíneos y aporte oxígeno y nutrientes en todos los órganos del cuerpo.
Muchas personas tienen alteraciones de la presión, cuando está por debajo del rango se llama hipotensión y cuando está por encima, se conoce como hipertensión. Esto sucede a causa de diferentes factores y el más común suele ser: por antecedentes familiares.
¿Qué puedo hacer si tengo hipertensión?
Primero consultar con un médico, luego, entre los factores que activan esta afección encontramos el exceso de sodio. Consumir menos sal y dejar los alimentos altos en este componente va a mejorar la función del corazón y la hipertensión. Dejar la sal no es fácil pero se puede reducir la ingesta de forma gradual y también probando nuevas especias en las comidas.
Las personas con sobrepeso tienen más riesgo de padecerla, por eso, mantener un peso saludable es fundamental para prevenirlo y tratarlo. A muchos les pasa que tienen apnea del sueño y al no respirar bien incrementa la presión. Los médicos usan un sistema de medición para saber si el paciente es de riesgo, lo que hacen es medir los centímetros de la cintura. Por ejemplo, la de una mujer no debe ser mayor de 89 centímetros, y en caso de los varones, 102. Si pasan esos números, requiere de una bajada de peso urgente.
El cigarrillo es totalmente nocivo para el organismo, en este caso afecta la función del corazón y la presión arterial. Por otro lado, el alcohol en exceso tiene el mismo efecto. Una mujer tiene permitida una copa o vaso de alguna bebida y los hombres como máximo dos.
Una alimentación saludable y equilibrada va a reforzar el buen funcionamiento de todo el cuerpo, además de realizar actividad física con frecuencia, los médicos recomiendan 30 minutos de caminata al día, tres veces por semana.
Por último, y no menos importante, controlar el estrés. Esto no es fácil, ya que parece casi involuntario, pero reflexionar sobre los temas que nos aquejan nos ayudará a gestionarlos mejor, muchas veces nos estresamos por problemas que ni siquiera existen y esto repercute en nuestra salud.