Los hábitos, las condiciones climáticas y los productos que utilizamos muchas veces pueden afectar el aspecto de nuestra piel. Normalmente nos preocupamos más por las marcas de expresión o las manchas que puede aparecer en nuestro rostro, omitiendo el cuidado de nuestra sonrisa.

El mercado ofrece tratamientos para agrandarlos, pigmentarlos, y cada semana salen a la venta labiales nuevos pero con poca información hay sobre cómo exfoliarlos, hidratarlos y cuántas veces al día hay que aplicarse protector solar. Además que algunos maquillajes de por sí los resecan y agrietan.

Los especialistas hacen énfasis en no lamerse los labios, ya que la saliva produce sequedad, también evitar morderlos o estirar la piel que puede sobresalir. Si tenés la zona resecada, están agrietados y con piel sobresaliente, lo mejor es exfoliarlos.

Podes aplicar por unos minutos un algodón humedecido con agua tibia, luego masajear suavemente con miel y azúcar. Estos pasos ayudarán a remover toda la piel muerta. Este procedimiento hay que realizarlo una vez por semana y de manera suave, ya que la zona es una de las más delicadas del cuerpo.

Para hidratar podes usar vaselina tradicional o manteca de cacao. Hay bálsamos nutritivos que incluyen en su fórmula manteca de karité, vitamina A y E, oleo de aguacate y cera de abeja, que son muy beneficiosos para la salud de nuestra piel. En caso de que no cuentes con ninguno de estos productos, podes utilizar un poco de aceite de oliva o aceite de bebé, que también sirven como desmaquillantes.

El protector solar no es una opción, es una obligación. Durante todo el año nuestra piel está expuesta a los rayos solares, que en exceso son nocivos, y estamos aún más expuestos durante el verano. También hay que tener en cuenta que pasamos muchas horas frente a las pantallas que emiten rayos UV. Actualmente ya podemos encontrar bálsamos y labiales que cuentan con protector solar en su fórmula.

Otros consejos básicos relacionado a nuestros hábitos son: mantener una buena hidratación, alimentarnos de manera equilibrada, no fumar, realizar actividad física y siempre desmaquillarnos antes de ir a dormir.