El equipo de la VOS te presenta las reseñas especialmente pensadas para prepararte para la gala más esperada de la temporada de premiaciones. En esta primera entrega, 4 de las 8 nominadas.
Minari por Luis Ríos
Luego del batacazo de Parasite el año pasado, la academia y la industria cinematográfica occidental empezaron a mirar más seriamente a oriente. Con Minari parece que se quieren limar las asperezas entre ambos espectros, porque si bien es una película estadounidense, apunta y respeta mucho a la cultura coreana desde el elenco, la utilización del idioma y los gags.
Introspectiva, se basa en la propia vivencia del director Lee Isaac Chung. Ofrece un retrato íntimo y desgarrador de la familia y la asimilación en los Estados Unidos de la década de 1980. Toca una problemática que se repite en varios países del mundo (incluido Paraguay); la inmigración coreana y ese “sueño americano” que tanto se muestra a través de las películas y la música. Al final, más allá de todo, deja un fuerte mensaje sobre la convivencia en armonía dentro de una sociedad para salir adelante.
Judas y el mesías negro por Paz Vaesken
Es la primera película noninada al Oscar en la historia que cuenta solo con productores negros, lo cual ya nos da una idea de que veremos algo diferente. El director y guionista, Shaka King cuenta la historia de cómo el FBI contrató a un ladrón y estafador negro, Bill O’Neal (Lakeith Stanfield) para traicionar a Fred Hampton de 21 años (Daniel Kaluuya), líder de Los Panteras Negras, a quién temían porque consideraban que podía llegar a convertirse en un mesías para la población de color.
Con intensas escenas de acción al estilo de Hollywood y una musicalización que logra fluctuar en nuestras emociones, nos transporta por completo a la época. Sobresale gracias a la profundidad psicológica de cada uno de los personajes y lograr que empaticemos no solo con Fred, en un Kaluuya que se entrega al personaje en cuerpo y alma; sino también con el Judas y el agente del FBI sobrio y calculador, Roy Mitchell, interpretado por Jesse Plemons. Aunque trae a la actualidad un hecho histórico, sigue tratándose de un problema social actual, con la invisibilidad, discriminación e inequidad hacia las comunidades de color que se hace visible gracias a Black Lives Matter.
Mank por Micaela Cattáneo
Sobre escritores con problemas alcohólicos, ya hemos visto mucho en la pantalla grande, sin embargo, en Mank, este personaje estereotipado se nutre de la forma de ser excéntrica de Herman J. Mankiewicz (Gary Oldman), quien en vida fuera el guionista del clásico Ciudadano Kane.
El director David Fincher proyecta en la pantalla un guión que su padre, Jack Fincher, había escrito antes de morir, y en el que la figura de Mank, pese a su mirada cínica y su actuar condicionado por la bebida, es ubicada en un podio frente a la imagen del otro guionista de la película, Orson Welles, quien en la realidad se llevó la mayor parte de los créditos.
Más allá de que la historia es contada para, de alguna forma, reivindicar el rol de Mank, la película de Fincher apuesta por la estética, y desarrolla todo ese proceso en blanco y negro, como en el Hollywood de los años 30; con una fotografía, vestuario y hasta expresiones faciales de los actores que evocan a lo mejor del cine de época.
El juicio de los 7 de Chicago por Jazmín Gómez Fleitas
Si de empatizar con una causa social se trata, la película escrita y dirigida por Aaron Sorkin, nos enardece en nuestro rol ciudadano. No importa que no seamos estadounidenses ni que esta historia haya sido un hecho del pasado, nos cala hondo, nos hace sentir la injusticia en lo profundo de nuestro ser y nos despierta.
En este thriller judicial la actuación coral es excelente y los nombres detrás hablan por sí solos. Cada uno de los protagonistas brilla en su actuación por plasmar tan detalladamente cada una de sus particulares personalidades, que destacan y se complementan a la vez, a lo largo de la película. Uno de los mejores momentos es sin duda el que se da entre Abbie Hoffman (Sacha Baron Cohen) y Tom Hayden (Eddie Redmayne) la noche que eligen quién debería testificar en el estrado. El potente final resuena en nosotros y nos quedará por mucho tiempo el eco que nos invita a analizar la realidad social que nos rodea.
No te pierdas mañana la segunda parte de las nominadas: The Father, El sonido del metal, Nomadland y Promising Young Woman. El domingo, nuestras apuestas a las categorías para predecir las ganadoras.