Decorar el dormitorio de los niños es también una forma de brindarles un ambiente más agradable, donde se sientan cómodos y parte del hogar, además se aprovecha mejor la utilidad de cada rincón. Desde los colores de las paredes hasta la elección de los elementos decorativos, estos son algunos consejos de LN tips para diseñar el espacio infantil.

El dormitorio es uno de los lugares donde más tiempo pasa un niño, por eso es tan importante que esas cuatro paredes se convierten en sus dominios y en una representación tangible de sus temores, ilusiones y forma de pensar. Por eso, si estás buscando crear un espacio que sea cómodo, acogedor y emocionante para tus hijos, asegúrate de incluirlos en el proceso.

Dependiendo de la edad del niño, pueden compartir preferencias sobre escritorios, temas o incluso colores. Si tus hijos comparten una habitación, incluso puedes incorporar ideas que equilibren cada una de sus perspectivas para que haya partes del espacio que realmente se sientan únicas e individuales.

También es importante incorporar sus personajes favoritos y las formas fáciles y flexibles de hacerlo son con calcomanías de pared removibles que se puedan quitar cuando cambie de opinión o puedes comprar ropa de cama y frazadas temáticas. Cuando se trata de los colores de paredes, es mejor tratar de optar por neutrales tanto como sea posible. Esto hace que el cambio sea mucho más fácil sin quitarle la diversión.

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Una cosa clave que los padres a menudo pasan por alto es que las habitaciones están hechas, en última instancia, para descansar. Las cosas simples pueden hacer una gran diferencia, por ejemplo es mejor comprar una cortina que vaya del piso al techo o que sea opaca para no dejar pasar la luz por completo, ya que esto ayudará con las rutinas de sueño, especialmente para los más pequeños.

Crea diferentes áreas para sus actividades preferidas porque esto puede ayudar con la autonomía, el trabajo, el juego autodirigido y la responsabilidad. Por ejemplo, crear una estación de tareas o un espacio de trabajo puede ayudar a los niños mayores a ser más responsables y concentrarse en sus tareas o proyectos escolares. Para los más pequeños, tener algunos juguetes didácticos puede ayudar a crear rutinas más sólidas alrededor de la cama o la siesta, porque estos serán parte del área para dormir.

Cuando se trata de crear el dormitorio infantil perfecto, algunas cosas clave a tener en cuenta son el temperamento, la personalidad y el comportamiento de tu hijo o hija. Si tienes un niño o niña que se sobre estimula fácilmente con su entorno, es mejor incorporar colores y tonos tenues, de esa manera el espacio se siente reconfortante y seguro. Además, puede ser útil agregar objetos sensoriales, mantas relajantes u otros artículos que evoquen alegría y paz.

Por otro lado, si tienes un niño o niña más enérgico o incluso bullicioso, es posible que desees considerar un juego de dormitorio para niños de tamaño completo que tenga diferentes capas, niveles o incluso incorpore movimiento con una escalera o un tobogán. Algo como esto puede crear una oportunidad para el juego y la autorregulación, a diferencia de una cama normal que sofocará la energía y el vigor naturales del o la pequeña.

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Las alfombras aportan estilo al interior del hogar y están disponibles en una variedad de colores y diseños. Son uno de los detalles más importantes para decorar el suelo y es fundamental que sean cómodas, suaves y acogedoras, por lo que una limpieza regular es clave para mantenerlas en óptimas condiciones.

Además de ser un elemento más en la decoración de las casas, las alfombras ayudan a mantener una habitación más cálida en invierno y suelen ser antideslizantes, lo que las hace una opción segura para áreas donde la gente puede caminar descalza o con medias, también protegen el piso de daños causados por muebles, arañazos y manchas, y agregan personalidad a los espacios de acuerdo a sus tamaños y diseños.

Para mantener a las alfombras limpias es imprescindible pasar la aspiradora al menos una vez por semana y ocuparse de los derrames y las manchas lo antes posible. Se recomienda realizar una limpieza más profunda al menos dos veces al año, y para ello es mejor hacerlo en días soleados y cuando haya viento para que se sequen más rápido.

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1. Saca las manchas lo antes posible. Siempre debes secar los líquidos con toallas de papel o un paño de microfibra. Para manchas sólidas como barro o comida que se han caído, usa el borde de una tarjeta de crédito o un cuchillo sin filo para quitarlas. Nunca frotes una mancha, ya que empujará los sólidos más profundamente en las fibras.

2. Aspira o barre semanalmente. Hacerlo regularmente al menos una vez a la semana evitará que el polvo y la suciedad se incrusten demasiado en la alfombra. La acumulación excesiva de suciedad causa olor y una acción abrasiva en las fibras, por lo que se ven desgastadas más rápidamente. Retira los muebles y otros artículos y aspira o barre lentamente en dirección vertical y horizontal.

3. Hacer una limpieza profunda. Cuando llegues al momento de una limpieza más profunda, aspira bien la alfombra por ambos lados. También puedes colgarla y golpear ambos lados con una escoba para aflojar la tierra, luego usa una manguera con boquilla rociadora o la configuración baja de una hidrolavadora para eliminar toda la suciedad.

Después de mojar la alfombra, llena un balde con agua fría y agrega aproximadamente 1/4 de taza de detergente. Aplica esta solución jabonosa con un cepillo para fregar y presta especial atención a las áreas muy sucias, luego enjuaga y déjala secar. Este último paso puede tardar hasta ocho horas, dale la vuelta al menos una vez para que circule bien el aire por ambos lados. Lo mejor es secar la alfombra por completo antes de volver a colocarla.

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Aunque sabemos que las plantas filtran el aire, aumentan la humedad y agregan un toque de naturaleza a nuestro entorno, a veces el problema es no tener suficiente espacio para ellas.

La ventaja de las plantas diminutas para el interior es que se pueden cultivar en cualquier lugar que necesites de un impulso verde, incluso hasta en una taza de té porque saben ajustarse a los espacios reducidos. Además de su innegable función decorativa, también reducen el estrés, mejoran la calidad del aire y absorben la humedad.

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Teniendo en cuenta que los beneficios de estas plantitas son iguales a las de mayor tamaño, empieza a crear un adorable paisaje en miniatura en algunos espacios de tu hogar. Aquí te presentamos una interesante variedad.

1. Tomillo lanudo. Siempre que necesites un estimulante de aromaterapia, coloca una maceta de esta plantita porque sus hojas suaves y peludas se pueden tocar y liberan una deliciosa explosión de aroma a tomillo con cada pizca. Crecen lento y solo alcanzan 7 cm de altura. Riega el tomillo lanudo con moderación, especialmente cuando la superficie del suelo esté seca al tacto.

2. Violeta africana. A estas plantas les gustan las macetas pequeñas, lo que estimula su floración. Mantené tus violetas africanas húmedas y en macetas, dales una luz brillante y aliméntalas con un fertilizante de flores equilibrado para que sigan funcionando todo el año.

3. Trébol morado. El género oxalis contiene varios cientos de especies de trébol, algunas de las cuales son hierbas malas y otras muy ornamentales. Esta planta crece 15 cm de alto y 20 cm de ancho y deben mantenerse en el lado seco.

4. Lágrimas de bebé. Cultiva lágrimas de bebé en un recipiente pequeño y colócalo debajo de una campana de cristal a la luz del sol filtrada brillante para darle a esta pequeña planta la humedad que necesita para mantenerse exuberante.

5. Cola de burro. Es la planta de interior perfecta para quienes tienen un lugar soleado y brillante porque puede trepar y extenderse un poco más. Sus hojas carnosas y suculentas son una pista de la tolerancia a la sequía de esta planta. Debes cultivar cola de burro en una mezcla para macetas de cactus arenosos para evitar la pudrición de la raíz.

Coloridas, brillantes y exóticas. Las plantas le dan vida al hogar, pero las flores tienen un toque extra que vuelven los espacios más especiales. Por eso, te presentamos a algunas que son perfectas para los ambientes interiores.

Tener plantas va más allá de los resultados estéticos. Ayudan a mejorar la calidad del aire en el ambiente porque poseen bondades purificantes, reduce la electricidad estática en el hogar, disminuyen el ruido y, a nivel mental, ayudan a aliviar el estrés y generar sensación de bienestar.

1.Amaryllis

Es una planta con flores exuberantes y resistentes; si reciben el cuidado adecuado pueden florecer varias veces en el año regalando capullos de color naranja, amarillo, rosa, blanco o bicolor.

En cuanto a su cuidado, se desarrollan bien en espacios luminosos pero sin recibir el sol directo y tampoco les gustan las temperaturas muy altas. Su riego debe ser esporádico, chequeando siempre que el sustrato esté seco.

2.Begonia

Sus flores son similares a las rosas y pueden ser de color blanco, rosa o rojo. Su nombre -begonia semperflorens- significa “siempre con flores”, lo que indica que florece casi todo el año, menos en épocas de mucho frío.

Es una especie que se halla en espacios bien iluminados, pero donde no reciba los rayos de sol directo. También necesitan que su sustrato se mantenga húmedo pero sin excesos, con regarla 1 vez cada 9 días en invierno y cada 3 en verano ya basta.

3.Hibiscus

Sus flores tienen forma de “trompeta” y sus hojas son verde y brillantes. Los colores pueden variar desde el blanco, naranja, rojo, violeta y hasta amarillo. En climas tropicales pueden florecer durante todo el año y se desarrolla bien en espacios luminosos. Otro dato que destaca a esta especie es su aroma inigualable.

Durante las épocas de frío requieren muy poco riego, y en épocas de calor es importante mantener siempre el sustrato húmedo y con buen drenaje.