La disminución de la vista es un problema común a medida que la edad avanza, debido a que las estructuras de este órgano cambian y afectan la calidad de nuestra visión.
El ojo va perdiendo su capacidad de acomodación como consecuencia de que la lente que tenemos dentro del ojo llamado “cristalino” se vuelve menos elástica con el paso de los años y esto dificulta principalmente la visión nítida a distancias cortas.
Los problemas de visión en las personas mayores son muy común, incluso pueden presentarse de forma severa. Por eso, es fundamental prevenirlos con anterioridad, porque el hecho de llegar a la tercera edad no justifica la pérdida de visión y siempre que esta aparezca, debemos acudir al especialista.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, generalmente las discapacidades visuales a nivel mundial se pueden prevenir o curar. Por lo tanto, visitar al oftalmólogo de forma regular y desde una edad temprana, es una medida esencial para evitar problemas graves que impidan desarrollar un envejecimiento saludable.
Aunque existen diversas causas para la disminución de la visión, las que se dan con más frecuencia en las los adultos mayores son:
1. Presbicia o vista cansada. Suele aparecer a partir de los 45 años debido al progresivo envejecimiento del ojo y la disminución de la elasticidad del cristalino. La solución para la vista cansada puede ser la utilización de anteojos, particularmente cuando debas realizar tareas como leer o trabajar frente al ordenador.
2. Cataratas. Se producen por la opacidad progresiva del cristalino que no permite que la luz pase a través de él. Es una de las causas más comunes de ceguera reversible, ya que los resultados de la cirugía suelen ser muy positivos.
3. Glaucoma: Es una enfermedad que afecta al nervio óptico, lo que provoca que se dificulte su capacidad de transmitir información al cerebro. Se recomienda realizar reconocimientos periódicos de la tensión ocular, sobre todo a partir de los 40 años y en personas con antecedentes familiares de glaucoma.
4. Retinopatía diabética: Se desarrolla a causa del daño en las células de la retina y se trata de una de las complicaciones más frecuentes de la diabetes. Si se siguen correctamente las pautas de alimentación, ejercicio y medicación, esta enfermedad permite una vida normal.
5. Degeneración macular: Es la más importante de las enfermedades oculares, ya que es la causa principal de la ceguera en personas mayores. La acumulación de sustancias de desecho en la parte central de la retina provoca la pérdida de visión central y visión deformada. La visión periférica se mantiene por lo que no afecta a la movilidad.
Te puede interesar: Para todo lo que beneficia a los adultos mayores las actividades al aire libre