Los calzados blancos están en su mejor momento, pero si no te estás animando a usarlos porque tienden a ensuciarse con más facilidad, aquí tenemos algunos trucos para dejarlos como nuevos.
Son tendencia en todas partes del mundo gracias a que combinan con cualquier prenda y logran destacarse como pieza clave del look. Pero su lado negativo es que a pesar de ser de cuero o gamuza, resulta difícil limpiarlos.
Afortunadamente, existen algunos remedios caseros sencillos para limpiarlos sin estropearlos para que vuelvan a ser blancos, incluso que brillen como si fueran nuevos. Por ejemplo, puedes utilizar bicarbonato de sodio y peróxido de hidrógeno, y las manchas difíciles sacar con un blanqueador.
Los calzados blancos deben limpiarse después de cada uso, basta con pasarles un paño húmedo o cepillar con un cepillo de cerdas suaves para eliminar la suciedad y las manchas de la superficie. Quitar la suciedad y las manchas cuando están frescas es mucho más fácil que tratar de eliminar una acumulación de suciedad.
Además, se recomienda una limpieza profunda en caso de manchas o suciedad severas, así como antes de guardar los zapatos blancos durante un período prolongado.
Calzados de cuero blanco
Ya sean calzados deportivos o de tacos, solo necesitas algunos suministros para mantenerlos limpios. Limpiarlos con bicarbonato de sodio ayuda a eliminar las marcas rebeldes.
1. Limpiar con agua corriente. Retirar los cordones, las plantillas y los adornos. Sumergir un paño de algodón o microfibra en agua corriente y escurrirlo para eliminar el exceso de agua. Luego, limpiar todo el zapato, prestando especial atención a las costuras y las áreas que tienen polvo y suciedad atrapada. Deja que los calzados se sequen durante al menos 15 minutos.
2. Limpiar las suelas. Humedecer la esponja de melamina y limpiar los bordes de las suelas. No usar la esponja en las partes de cuero de los zapatos porque puede quitar la capa superior del cuero.
3. Eliminar marcas de suciedad y rozaduras. Mojar un paño limpio y agregar un poco de jabón para crear espuma. Limpiar el cuero trabajando en una sección pequeña a la vez con un movimiento circular suave. Comienza en los dedos de los pies y continúa trabajando a lo largo de los lados y el talón.
Elimina las marcas de desgaste difíciles con bicarbonato de sodio, ya que es un limpiador abrasivo suave. Espolvorea bicarbonato de sodio en un paño húmedo y frota suavemente la marca hasta que desaparezca.
4. Enjuagar y secar. Limpiar cualquier residuo de jabón con un paño limpio humedecido con agua corriente. Escurra el paño para que no esté demasiado húmedo. Luego, deja que los zapatos se sequen al aire lejos de la luz solar directa. Si los calzados no están tan blancos como te gustaría, repite los pasos.
Calzados blancos de gamuza
No suelen ser de color blanco brillante, pero aún así deben limpiarse con cuidado.
1. Cepillar. Comienza cepillando todo el calzado con un cepillo de cerdas suaves para eliminar la suciedad suelta e incrustada.
2. Quitar las manchas. Espolvorea las manchas aceitosas con maicena o polvos de talco para absorber el aceite. Déjalo en la mancha durante al menos una hora y repite según sea necesario. Luego, frote suavemente las marcas de desgaste y las manchas con el borrador de goma de mascar. No frotar y trabajar lentamente para eliminar las manchas en capas.
Si el borrador no elimina las manchas, sumergir un paño en vinagre destilado y frotar suavemente las áreas manchadas. Secar el área tratada con una toalla de papel para absorber la humedad.
3. Secar y pulir. Permite que la gamuza se seque por completo después de la limpieza y usa un cepillo para gamuza para pulir los zapatos y levantar cualquier residuo que haya quedado en el tejido.
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