Las exigencias profesionales pueden sobrepasar nuestro límite y derivar en un estrés laboral que afecta nuestra salud física y mental. Te contamos cómo priorizar tu bienestar y mantener el equilibrio.
El estrés relacionado con el trabajo puede afectar nuestra paz interior, estilo de vida, productividad y relaciones interpersonales, incluso cuando se vuelve crónico genera efectos negativos en la salud física como dolor de cabeza, alteración del sueño, baja de peso, gastritis y dolores musculares.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se lo identifica como un grupo de reacciones emocionales, psicológicas, cognitivas y conductuales ante exigencias profesionales que sobrepasan los conocimientos y habilidades del trabajador para desempeñarse de forma óptima.
El cuerpo produce un estado de agotamiento cuando se genera una discrepancia entre nuestra demanda laboral y nuestros recursos para hacerlas frente, por eso se puede sentir cierta tensión a pesar de amar lo que hacemos.
La exposición a largo plazo al estrés no controlado puede afectarnos gravemente, de hecho investigaciones recientes demuestran un potencial vínculo con la depresión y ansiedad.
Estos son algunos pasos para mantener el estrés laboral al mínimo:
1. Ser consciente de cómo afecta
Esto puede sonar demasiado simple, pero es fácil subestimar la cantidad de sobre exigencias que se nos presentan. Así que mejor tomar nota si se encuentra emocionalmente agotado y pesimista al final del día.
Identificar y registrar situaciones estresantes puede ayudarlo a comprender qué es lo que le preocupa. Algunos de estos pueden ser fuentes sutiles de tensión, como un espacio de trabajo incómodo o un largo viaje al trabajo .
Lleve un diario durante una semana para realizar un seguimiento de sus factores desencadenantes del estrés y sus reacciones ante ellos. Asegúrese de incluir las personas, los lugares y los eventos que le dieron una respuesta física, mental o emocional.
2. Tomarse un tiempo para sí mismo
Unos minutos de tiempo personal durante un día ajetreado puede ayudar a prevenir el agotamiento. Puede escuchar un podcast interesante entre reuniones o ver un video divertido de YouTube para desconectarse de los asuntos laborales un rato.
También es importante tomar descansos mentales, como no revisar los correos electrónicos relacionados con el trabajo en su tiempo libre o desconectarse de su teléfono por las noches.
3. Perfeccionar las habilidades de gestión del tiempo
A veces, sentirse abrumado por el trabajo se reduce a lo organizado que eres. Intente establecer una lista de prioridades al comienzo de su semana laboral preparando tareas y clasificándolas según su importancia. Además, puede vencer la procrastinación reservando bloques de tiempo específicos para un trabajo de concentración profunda.
4. Equilibrar la vida laboral y personal
Estar disponible las 24 horas lo agotará fácilmente, por eso es fundamental crear límites claros entre su trabajo y vida hogareña para ayudarlo a evitar el estrés potencial. Parte de esto significa reservar tiempo para socializar y establecer reglas sobre cuándo revisará los mensajes o atenderá llamadas telefónicas.
5. Reevaluar los pensamientos negativos
Cuando experimenta preocupación y ansiedad durante un período prolongado de tiempo, su mente puede tender a sacar conclusiones precipitadas y leer cada situación de forma negativa. Entonces, en lugar de hacer juicios automáticos, trata de distanciarte de tus pensamientos negativos y ocupa tu mente en actividades que te gustan.
6. Crear red de apoyo
Manténgase en contacto con amigos y familiares de confianza para ayudarlo a sobrellevar situaciones laborales estresantes. Si tiene dificultades, tener personas con las que pueda conversar puede aliviar parte de la tensión acumulada.
7. Dedicar tiempo al cuidado personal
Reservar tiempo para el cuidado personal es imprescindible si regularmente te sientes abrumado por el trabajo. Esto significa priorizar el sueño, reservar tiempo para divertirse y asegurarse de comer durante todo el día.
La meditación, los ejercicios de respiración profunda y la atención plena funcionan para calmar la ansiedad, por eso comience por tomarse unos minutos todos los días para concentrarse en estar presente y disfrutar de una actividad simple.
8. Evitar los chismes
Los conflictos en el lugar de trabajo pueden afectar gravemente su bienestar emocional, evite participar en situaciones de chismes. Si sabe que uno de sus colegas es especialmente propenso a los chismes, busque la manera de pasar menos tiempo con él o de llevar la conversación a temas más seguros.
9. Dejar de lado el perfeccionismo
Si bien el perfeccionismo tiene algunos beneficios positivos, también puede ser muy estresante y provocar agotamiento, mejor trate de mantener sus altos estándares bajo control enfocándose en el esfuerzo que pone en un proyecto y no personalizando el fracaso cuando comete un error.
10. Ir de vacaciones
Ser capaz de desconectarse de las responsabilidades y actividades relacionadas con el trabajo puede ayudarlo a relajarse y descansar para recargar energías.
¿Cuando acudir a un profesional?
No necesita tener una condición de salud mental para probar la terapia. Sentirse abrumado en el trabajo es una razón perfectamente válida para buscar ayuda y apoyo adicional.
Trabajar con un terapeuta puede ayudarlo a identificar mejor las fuentes de su estrés laboral y a encontrar formas de enfrentarlas. Durante su proceso, aprenderá a desarrollar estrategias para relajarse y cuidarse.