La protagonista de esta edición de Poderosas con Marilé Unger fue la diseñadora de modas e influencer, Nara Mieres, quien además se destaca como emprendedora a sus 23 años.

Por: Verónica Giménez

La talentosa diseñadora sigue los pasos de su madre en la industria de la moda desde muy pequeña, y a través de las redes sociales se convirtió en una inspiración para quienes también desean perseguir sus sueños a muy temprana edad.

“Crecí entre la máquina de coser, los hilos y las telas. Entonces es como que siempre tuve muy definido qué quería para mi vida. Vinculo mi relacionamiento con la gente y la moda que es mi pasión, esas son las dos cosas que más me gustan y tengo la dicha de poder trabajar en ellas”, expresa Nara.

Comenta que en algún momento de su vida quiso ser abogada, pero finalmente descubrió que lo suyo es el comercio, ya que proviene de una familia de comerciantes que casi siempre dieron mayor enfoque a la mujer.

“Desde los 6 años ya quería trabajar y a los 7 tuve mi primer ahorro vendiendo moños. Como ya sabía utilizar las máquinas de coser de la casa, los hacía y llevaba a la escuela para vender. Mi mamá no se enteró hasta que le llamaron del colegio. Habré juntado G. 500.000 y la primera compra que hice fue una heladera para mi pieza”, recuerda entre risas.

Y agrega: “Creo que de eso se trata, de desafiarse y ponerse metas largas y cortas. Es satisfactorio poder cumplirlas, no importa qué edad tengas”.

Su gran hazaña llevó a la pequeña Nara a convertirse en una exitosa emprendedora, a abrirse paso en el mundo de la moda y a llegar a numerosas personas a través de las redes sociales. “Siempre me pongo metas y es muy satisfactorio ir tachando las cosas que uno tiene pendiente o que se propone”, resalta.

Club de Mujeres

El emprendimiento desarrollado por Nara es un sueño gestado hace muchos años, pero que recientemente salió a la luz. “Crear algo así implica muchas cosas. Hay un equipo grande de trabajo detrás, un montón de factores que debieron coincidir en el momento preciso, por eso digo que se dio en el momento que se tenía que dar, porque la idea de tantos años se volvió realidad en un mes”, destaca emocionada.

Describe que el proceso de pasar de una idea a algo tangible fue bastante rápido y que además estuvo impulsado por la necesidad de ofrecer al género femenino todo lo que necesita y en un solo lugar.

“Siempre trabajé con mujeres, poniendo el foco principalmente en lo que visten, por eso sentía que faltaba algo más. Faltaba una experiencia completa donde una mujer pueda encontrar de todo para realzar su belleza”, explica.

Y continúa: “No solo es un lugar comercial, es más bien un espacio cálido, donde las mujeres se sientan atendidas, mimadas, cuidadas e importantes. Eso es lo que nosotros queremos crear allí desde lo más mínimo y con cada detalle”.

Paralelamente a su trabajo en la moda, también se dedica a la creación de contenido para las redes sociales y es embajadora de diferentes marcas, tanto nacionales como internacionales. “Intento tener una relación cercana con mis seguidores, de hablar y tener tiempo para compartir, porque se crea una fidelidad y formamos una comunidad. Les digo que no se midan con las reglas de otras personas, que hagan las cosas a su manera, tiempo y forma”, comenta.

De madre e hija a compañeras de trabajo

Como Nara comparte con su madre la misma pasión, empezaron a trabajar juntas desde que ella tenía 15 años. De hecho, fue su mamá quien inició el proyecto que posteriormente ella cumplió.

“Me volví una persona responsable, solté la adolescencia y fui tomando más en serio todo el trabajo. Hoy en día trabajamos codo a codo, no porque yo sea más chica tengo menos responsabilidades, al contrario, trabajamos como compañeras. Siempre fuimos ella y yo”, expresa.

Y añade: “Para mí es un honor que mi mamá haya confiado en mí a tan temprana edad, de darme todas esas herramientas para que yo me anime, porque siempre ese empujón es importante. Esa confianza que te da en casa la gente que más necesitas, es la que te hace ir para adelante”.

Nara describe a su mamá como una mujer valiente, poderosa, buena persona, laburadora y paciente. Confiesa además que es una de sus principales referentes y que siente hacia ella una profunda admiración. “Siempre le digo ‘vos y yo contra el mundo, y yo el día de mañana quiero ser un cuarto de lo que vos sos’”, expresa.

Tanto sus sonrisas como su emoción se mantuvieron al hablar de su padre, quien a pesar de ya no acompañarlas en vida permanece en su corazón. “Me hubiese encantado que esté ahora en la inauguración. Él me acompaña desde el cielo, pero estoy segura que iba a estar muy orgulloso de todo esto”, concluye.

El video completo de la entrevista lo encontras aquí.