Para muchos, es una de las actividades más placenteras, independientemente de si canten bien o mal. Lo que importa es elevar la voz, sentir la canción y dejarse llevar. Estos son sus principales beneficios.
Cuando cantamos nuestro organismo libera endorfinas, serotonina y dopamina, las sustancias químicas de la “felicidad” que mejoran nuestro estado de ánimo y nos hacen sentir bien. Además implica expresar nuestras emociones, lo cual es bueno para la salud mental.
Al cantar nos sentimos más positivos, animados y motivados, pero sus efectos no solo se concentran en lo emocional, también aporta en la salud física porque es una actividad aeróbica que nos mejora la circulación, el sistema nervioso y el aparato respiratorio.
Está científicamente comprobado que cantar requiere una concentración focalizada, que bloquea las preocupaciones y distrae de los problemas, además exige una respiración profunda y controlada, lo que contrarresta la ansiedad.
10 beneficios que aporta a la salud
1. Favorece la función del cerebro
Cantar puede ser un ejercicio útil para mejorar la conexión entre las distintas áreas del cerebro. Además, ayuda en el tratamiento de ciertos problemas en el habla, como la tartamudez y la afasia, entre otros problemas neurológicos como lesiones cerebrales no congénitas, mal de Parkinson o trastornos del espectro autista.
El aprendizaje y el entrenamiento del canto se considera como una “gimnasia mental” que promueve las nuevas sinapsis, por ende, la neurogénesis y la plasticidad cerebral, algo que es clave sobre todo en los adultos mayores para prevenir o retrasar el deterioro cognitivo.
2. Mejora la función pulmonar
Poco tenemos en cuenta la salud de nuestros pulmones, ya que la mayoría rara vez los usa en su máxima capacidad. Cantar requiere aumentar la capacidad pulmonar y ejercitar los músculos alrededor de la caja torácica.
Es por eso que el canto se ha utilizado para ayudar a rehabilitar a las personas que se recuperan de afecciones pulmonares y, más recientemente, para beneficiar a los que quedaron con secuelas del Covid-19.
3. Combate el estrés y ayuda a relajarse
Respirar correctamente y con más conciencia es bueno para liberar la ansiedad y ayudarnos a pasar a un estado de descanso y relajación. Entonces, si has tenido un mal día, prueba cantar. Prometemos que sus propiedades antiestrés lo ayudarán a olvidar sus preocupaciones y simplemente estar en el momento.
4. Fortalece la memoria
Cantar puede ayudar a mejorar el estado de alerta mental y la memoria, ya que implica concentrarse en varias cosas a la vez, involucrando muchas áreas del cerebro en el proceso. La música también se está convirtiendo cada vez más en una característica del cuidado de la demencia, ya que fue demostrado ser una herramienta poderosa para despertar recuerdos, a menudo mucho después de que otras formas de comunicación hayan disminuido.
5. Potencia los vínculos afectivos
Cantar con otras personas puede ayudar a construir conexiones y sentimientos de unión. Investigaciones recientes también constataron que las relaciones entre uno mismo y el otro se sincronizan mejor y aceleran los vínculos sociales.
6. Expresa las emociones y sentimientos
Cantar es la manera perfecta de dejarse llevar y expresar cómo nos sentimos. Promueve el bienestar y brinda una buena dosis de alegría, el canto puede ser beneficioso para las personas que viven con un dolor persistente o en estado de depresión.
7. Aumenta la confianza
Muchas personas se ponen nerviosas ante la idea de actuar en público, pero cantar puede ayudar a aumentar la confianza personal y elevar el autoestima. Cuanto más lo hagamos, más seguro nos sentiremos.
8. Mejora postura corporal
Cantar de manera profesional corrige la posición de las vértebras cervicales y la hipolordosis, que es el aumento de la curvatura de la columna. La persona que canta tiende por sí sola a adoptar posturas más correctas, debido a que existe una relación entre la forma apropiada de colocar el cuerpo y el tono de la voz.
9. Favorece la comunicación verbal
Otro hecho positivo de cantar es que a menudo enseña a articular mejor los sonidos y, en consecuencia, a pronunciar mejor las palabras, más aún si es en otras lenguas. Debido a eso, cantar canciones es un ejercicio recurrente en los cursos de idiomas.
Participar en un coro también podría tener efectos positivos para la tensión arterial, debido a que tal actividad estimula una sincronización de los patrones cardíacos y respiratorios.
10. Cantar es para todos
La buena noticia es que no importa si cantamos afinado o no, los beneficios para la salud seguirán siendo los mismos. Lo realmente importante es disfrutar de las melodías, dejarse llevar, divertirse y experimentar por sí mismo el bienestar que brinda el canto.