Cuando se trata del nacimiento de una niña, la mayoría de los padres siguen la costumbre de perforar las orejas casi de manera inmediata. Suele creerse que en ese momento sienten menos dolor, pero ¿es recomendable?
Poner aritos a las recién nacidas es una costumbre arraigada en nuestro país, de hecho, hoy en día los centros asistenciales de salud cuentan con la posibilidad de colocarles en las primeras horas de vida, bajo la creencia de que al ser menos conscientes, no sienten mucho dolor.
Las razones también suelen estar vinculadas a un aspecto estético, ya que se cree que así lucen más bonitas y podrán ser diferenciadas de los varones. Como existen algunos padres que prefieren seguir esta práctica, hay otros que analizan los pros y contras de perforar las orejitas a las bebés de manera temprana.
Más allá de estos motivos, mantenerlas saludables es el mayor propósito, por eso los profesionales consideran que no deben hacerse agujeros en las orejas a menores de seis meses. Según recomiendan es mejor esperar a que tengan seis a siete años, porque a esa edad su sistema inmune ya será suficientemente fuerte. O bien, completar mínimamente su esquema de vacunación hasta el primer semestre de vida.
Si bien los riesgos de las perforaciones son los mismos para todos, al tratarse de recién nacidas puede ser más grave, debido a la delicadeza de la piel y las infecciones que pueden contraer. Además los materiales de los aritos pueden producir alergia, que al ser recién nacidas es más difícil de tratar, y aunque no lo parezca, las bebés sufren más estímulos dolorosos al sentir la perforación en las orejas.
No obstante, si los padres deciden colocarles los aritos a temprana edad, es importante que recurran a lugares seguros, como una farmacia o los centros asistenciales de salud. Antes de hacer los agujeros, se debe verificar que se desinfecte la piel, no solo el lóbulo de la oreja sino toda la zona y que los instrumentos sean desechables y estériles.
Otro punto a tener en cuenta es que los aritos estén hechos de material hipoalergénico para evitar reacciones, a pesar que no hay certeza absoluta en ello. La parte inferior del pendiente debe ser de acero quirúrgico y nunca deben colocarse de bisutería.
Luego de la perforación, es aconsejable aplicarles durante unos días una crema a base de antibióticos en los lóbulos para evitar el riesgo de infección.