El domingo de Pascua es un buen momento para compartir con los seres queridos, y realizar actividades que entretengan a los más pequeños del hogar. Estas son algunas ideas para jugar con ellos.
A través de los juegos, los niños activan su creatividad y desarrollan sus capacidades. Este domingo es el día ideal para jugar con los huevos de Pascua, las figuras de conejitos y otros elementos que permitan la diversión y el entretenimiento de la familia.
1. Buscar los huevos de Pascua
Este juego además de incentivar la curiosidad de los pequeños, también impulsa su creatividad e ingenio. Esta actividad puede ser planteada con varios desafíos.
Se trata de esconder los huevos de Pascua dentro o fuera de la casa. Los pequeños pueden recibir pistas, como acertijos o adivinanzas, que les lleven a los lugares donde están ocultos los chocolates.
Además se les puede incentivar con la aparición de otros dulces para que se sientan motivados en encontrar el premio mayor.
2. Carrera
Los obstáculos son claves para desafiar la habilidad de los pequeños y generar momentos divertidos. Se pueden plantear las carreras de velocidad con dificultades en el exterior de la casa.
Una de las opciones es que tengan que recorrer cierta distancia sosteniendo una cuchara con la boca y, en la misma llevar un huevo de Pascua. En caso que el huevo se les caiga, deben volver al punto de partida.
Otra alternativa es poner obstáculos en el recorrido, y en vez de llevar el huevo en una cuchara sostenida con la boca, cargarlos en una canasta o un recipiente similar. Esta actividad deben realizar corriendo.
3. Dibujar y colorear
Dibujar y colorear son actividades que les permiten desarrollar su motricidad fina y otras habilidades. Cada niño puede explotar su creatividad a través de los dibujos de conejitos o de huevos de pascua. Antiguas tradiciones europeas vinculan a los conejos con estas fechas, pero en otras regiones también se relacionan gallinas y otros animales de corral, así que los niños pueden tener libertad para dibujar esas aves, cerdos, vacas e incluso sus propias mascotas.
4. Pegar las figuras de huevos de Pascua en la canasta
Este juego es similar al de Poner la cola al burro, en el que los pequeños con los ojos vendados y después de dar algunas vueltas para perder la orientación, deben guiarse por su intuición y las indicaciones de los demás para pegar las figuras de la temática sobre una superficie que no ven.
En esta ocasión, se sustituyen los dibujos de un burro y su cola por una cesta y huevos de Pascua. De esta forma, el juego es más sencillo y pueden ganar todos los que participen. Además, se pueden utilizar los dibujos realizados y coloreados por los propios niños.
5. Juego de la memoria
También conocido como Memotest, permite adaptar el juego a la temática de Pascua. Basta con tener dibujos de huevos y animalitos, que incluso pueden ser preparados por los propios participantes.
Debemos tener en cuenta que los dibujos deben aparecer por pares y ser iguales, tanto en la forma como en el color. Además hay que procurar que el dorso sea lo más parecido posible en todos los dibujos. Para esto último, se puede usar cartulina, cartón, u otros materiales.
Esta actividad se trata de colocar todos los pares de dibujos boca abajo y, por turnos, se dan vuelta dos. Si el dibujo coincide, el niño se los lleva. Si no logra adivinar dónde se encuentra el par, los vuelve a girar y los deja en el mismo sitio.
La clave es memorizar donde está cada uno para al descubrir el mismo dibujo en un turno siguiente, poder llevarse el par. El que acaba el juego con más dibujos gana la partida.