Ambos artistas presentaron un mix de sus temas más icónicos. Dos músicos, dos estilos y un encuentro generacional único.
El artista argentino Iván Noble lideró durante más de una década a Los Caballeros de la Quema y cuenta, además, con una larga carrera como solista. Su compatriota Rusherking, oriundo de la provincia de Santiago del Estero, con apenas 21 años ya es uno de los referentes de la nueva escena urbana de su país.
El periodista Bebe Contepomi reunió a estos dos grandes artistas para su ciclo La previa con Bebe, en el que Iván regraba, por primera vez, su clásico con Los Caballeros, Avanti Morocha, combinándolo con la balada de Rusher, Otra noche más.
El resultado, con producción de Big One, logra unir dos escenas distantes en el tiempo, pero que demuestran tener código musicales y estéticos en común: el espíritu del rock barrial de los 90, con el decir de la música urbana de hoy en día, en un mashup imperdible.
Las dos caras de la moneda
Los artistas tienen cada uno similitudes y diferencias hasta llegar a este momento. Algunas son por ejemplo: Rusher dice que “la música a veces salva” e Iván - citando a Nietzsche - que “la vida sin música sería un error”; el ídolo musical de Rusher de chico fue Daddy Yankee y el de Noble, Rod Stewart.
Por otro lado, Rusher se subió a un escenario, por primera vez, hace cinco años, en una competencia de freestyle. E Iván hizo lo propio con una banda de hard metal que tuvo en su época de escuela secundaria, llamada Falso Contacto, donde tocaba la batería.
Además, Rusher se dio cuenta un día que tenía que dejar el freestyle y dedicarse a escribir canciones. Iván sintió que tenía que dejar la facultad para dedicarse de lleno a la música, cuando con Los Caballeros de la Quema, firmó su primer contrato discográfico.
La canción
La versión original de Avanti morocha (1998) actualmente tiene más de 35 millones de escuchas en plataformas digitales y más de 58 millones de vistas de su clip. El hit Otra noche más (2020) supera los 30 millones de reproducciones de audio y video.
“Para mí las canciones son botellas al mar, algunas llegan a la costa, otras no; otras quedan flotando en el medio del océano, muchos años después viene alguien y las agarra, nunca se sabe. Lo que pasa es que el mar, hoy, es internet, entonces todo es inmediato”, sostiene Noble.
Hoy, las dos canciones se fusionan en un solo tema nuevo, que demuestra que es posible que músicos de generaciones y estilos diferentes convivan en perfecta armonía musical. “Quiero que mi música se siga escuchando en el tiempo. No apuntamos a sonar hasta mañana, sino hasta donde se pueda”, cierra Rusher.