Antiguos robots de la industria del automóvil como jardineros en un parque de Tokio: Esta es la insólita instalación de un artista británico durante todo el periodo de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos en la capital japonesa.
Cuatro imponentes brazos robóticos de unos dos metros de alto elaboran formas a partir de los movimientos captados en vídeo en los precedentes Juegos.
“Es una especie de espejo, una especie de reflexión sobre lo que pasa en los Juegos”, explicó Jason Bruges, el artista británico autor de esta obra, inscrita en el festival cultural de Tokio organizado con motivo de la cita olímpica.
Bruges establece un paralelismo entre los robots y los deportistas, que repiten durante años los mismos movimientos para alcanzar la perfección en un dominio muy preciso. “Sea un corredor, un skater o un ciclista, tendrán condicionado el cuerpo por algo único”, dijo.
Bruges y los otros miembros de su estudio cruzaron el arte y las nuevas tecnologías para analizar y tratar secuencias de video de deportistas que participaron en los Juegos de Rio 2016. Los movimientos de sus cuerpos se convirtieron en datos que sirven como instrucciones para los robots, capaces de reproducir 150 formas y movimientos diferentes.
Bruges, que dice querer incitar a la gente a ver la tecnología desde otro ángulo, espera que su instalación permita a los visitantes reflexionar, meditar y encontrar la calma.
Llamada The Constant Gardeners (un guiño al libro y la película El jardinero fiel), su instalación abrió el miércoles en el parque Ueno, en el corazón de Tokio, y permanecerá abierta hasta el final de los Juegos Paralímpicos, el 5 de septiembre.
Fuente: AFP.