El ritmo de vida actual es acelerado. ¿Acaso la posibilidad de adelantar los audios de WhatsApp no es una muestra de ello? Vivimos en una sociedad muy distinta a la de unos 20 años atrás o más; sin duda, una con más facilidades, pero también con mayores problemas.

El estrés es uno de los grandes males de la llamada “era digital”. En muchos casos, este estado de cansancio mental provocado por la exigencia de un rendimiento muy superior al normal ha derivado en otra respuesta emocional aún más preocupante: la ansiedad.

Esta situación de tensión, donde el corazón late más fuerte y la respiración se acelera, está marcada por los pensamientos. Por eso, es importante trabajar en mantener la calma y en saber encontrar paz cuando el ajetreo diario provoca un desequilibrio en las emociones.

Para relajar el sistema nervioso es necesario oxigenarlo, por eso lo primero y principal es prestarle atención a la respiración. Respirar profundo es clave para que el cerebro capte que el peligro se ha ido. Asimismo, otro aspecto fundamental es el movimiento, ya que este libera la tensión y el estrés que uno pueda estar cargando en ese momento.

Estos son los cinco ejercicios que recomiendan los especialistas para que el sistema nervioso vuelva a la normalidad: llorar conscientemente, para descargar la tensión física; reír, para relajar la mandíbula y segregar endorfinas, las llamadas “hormonas de la felicidad”; hacer vibraciones con la garganta, para darle tono al nervio vago; tener relaciones sexuales generando un vínculo, para que el sistema nervioso suelte la tensión física y emocional, y por último, entrar en contacto con la naturaleza, para sentir calma.

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