La obra de Pablo Picasso Mujer sentada junto a una ventana (Marie-Therese) se vendió esta semana por 103,4 millones de dólares en la casa de subastas Christie’s de Nueva York.
El cuadro, de 1,46 por 1,14 metros, terminado en 1932, se vendió por 90 millones de dólares, que se elevaron a 103,4 millones cuando se añadieron los honorarios y las comisiones, tras 19 minutos de puja, según la casa de subastas.
La obra, que representa a la amante y musa de Picasso, Marie-Thérèse Walter, casi duplicó la estimación inicial proporcionada por Christie’s de 55 millones de dólares. La venta confirma la vitalidad del mercado del arte, que no ha sufrido realmente los efectos de la pandemia, pero también el estatus especial de Pablo Picasso.
La misma pintura fue adquirida hace solo ocho años por su actual propietario en una subasta de Londres por unos 44,8 millones de dólares, menos de la mitad del precio ofrecido esta semana.
Cinco obras del pintor español han traspasado ya el umbral simbólico de los 100 millones de dólares. Incluso antes de esta venta, ya estaba solo a la cabeza con cuatro cuadros, entre ellos Les femmes d’Alger, que ostenta el récord de un Picasso, 179,4 millones de dólares, en mayo de 2015.
Es la primera vez en dos años que una obra supera los 100 millones de dólares, ya que una copia de la serie Meules de Claude Monet alcanzó los 110,7 millones en Sotheby’s de Nueva York.
El año 1932 es a menudo considerado como el más prolífico de Picasso. Varias exposiciones de importancia han sido consagradas a la producción de ese año del artista español.