De pantalones y camisetas grandes a un corsé y medias finas, así fue la transformación que la cantante estadounidense de 19 años dejó ver en la portada de la edición británica de la revista Vogue. Su fantasía era esa: lucir un estilo pin-up clásico y antiguo.

Y así lo hizo: posó con guantes de látex de Atsuko Kudo, una falda Gucci (su marca de cabecera) y varias piezas de lencería de Agent Provocateur. “Todo se trata de lo que te haga sentir bien”, declara la estrella pop en la tapa de la revista, tras una entrevista en la que también confiesa que su cuerpo es su inseguridad más profunda y que esta ha sido la razón inicial de su depresión, la misma que la ha llevado a usar ropa holgada.

“Billie representa algo completamente nuevo. Es una artista en continua evolución con una nueva visión e interpretación de sí misma en términos de feminidad. Billie está exactamente donde quiere estar sin prejuicios. Por eso es tan estimulante trabajar con ella: me obliga a pensar de manera diferente”, mencionó el director creativo de Gucci, Alessandro Michele, quien ha colaborado en varias ocasiones con Eilish.

En esta entrevista, donde muestra su nuevo look rubio luego de meses de llevar tonos grises y verdes intensos en la cabeza, reflexiona sobre la responsabilidad que tiene el espectador acerca de sus prejuicios hacia la apariencia de los otros. “No me conviertas en un modelo a seguir porque yo te excite”, dice contundente.

La joven artista opina de estos temas porque su nueva imagen ha sido la publicación más rápida en alcanzar un millón de likes en Instagram. Sí, en seis minutos la foto de su nuevo tono en el cabello no ha pasado desapercibido para nadie, y mucho menos la historia que cuenta en el estilismo de la British Vogue, donde aprovecha el fenómeno para hablar sobre los gustos personales, los miedos, el cuerpo de las mujeres, el consentimiento y, sobre todo, la confianza.

En la charla con la periodista, Eilish predice las reacciones que tendrá la portada: “¿por qué usa corsé si defiende la positividad corporal? o ¿por qué no muestra su cuerpo real?”. Pero ella tiene una respuesta para todo: “Yo puedo hacer lo que quiera. La confianza es mi único evangelio. Se trata de hacer lo que te hace sentir bien. Si querés usar un vestido que alguien piensa que te queda muy grande, a la mierda, si sentís que te ves bien, te ves bien”, afirma.