Cada vez son más las deportistas que se hacen lugar en deportes incorrectamente definidos “para hombres”, y esta vez la deportista Joaquina Urrutia Pappalardo, de 17 años, contó a VOS su experiencia como luchadora olímpica paraguaya, sus sueños y compartió algunos consejos para afrontar comentarios sexistas.

Por: Maria Paz Vaesken

La luchadora, miembro de la Selección Paraguaya de Lucha Olímpica, se prepara para los Panamericanos Juveniles en Cali, Colombia, y para los juegos ODESUR 2022 que se realizarán aquí en Asunción.

“Practicar olympic wrestling (lucha olímpica) es relajante y divertido, puedo compartir con personas que tienen intereses iguales a los míos. Además, refuerzo los valores que aprendo en casa como: el respeto, la responsabilidad y el esfuerzo para conseguir lo que me propongo, trabajo en equipo y lealtad, sin olvidar el beneficio de un estilo de vida saludable”, explicó.

Urrutia indicó que por mucho tiempo practicó brazilian jiu jitsu e iba a cursos de sambo y judo, y fue hace 3 años atrás, quizás un poco más, que su entrenadora actual, Steph Bragayrac, contactó con ella para asistir a un entrenamiento de beach wrestling y desde esa vez ya no para.

“Como cualquier otro deporte que una persona practique a nivel olímpico o profesional, el atleta más allá de tener talento y aptitudes, debe tener dedicación, responsabilidad, compromiso, fortaleza mental y física, pero sobre todo, mucha garra”, añadió.

SEXISMO EN EL DEPORTE

La joven luchadora comentó a VOS que lastimosamente aún existe el sexismo en este deporte al igual que en otros mal denominados deportes masculinos, aunque indica que el problema va disminuyendo.“He recibido unos cuantos comentarios en burla, pero no es algo a lo que le preste atención, prefiero ignorarlo y seguir haciendo lo que me gusta”, resaltó.

Durante mucho tiempo a las mujeres que, por ser físicamente fuertes, las señalaban con términos como “robustas” “machonas” o “poco femeninas”, la deportista aconseja sobre estas descripciones u otros comentarios:

“Que no les afecte en lo más mínimo el estereotipo ridículo que la sociedad impone día a día, si a ti te gusta tu cuerpo, te sientes bien y por sobre todo estás sana no tendrás porqué darle atención a ese tipo de comentarios. Sí, es cierto que cuesta no dejarse afectar por eso, pero con el tiempo te darás cuenta que da igual la opinión de los demás sobre cómo eres físicamente, solo importa la tuya. Eres preciosa, da igual lo que diga el resto”, añadió.

Por otro lado, habló acerca de cómo la palabra “débil” solía definir al género femenino, “este tipo de pensamiento, por decirlo de alguna forma, principalmente era causado por una creencia arraigada antiguamente por el tipo de crianza que se recibía. Esto fue cambiando con el paso del tiempo, ya que vamos rompiendo estereotipos y estamos conquistando espacios dominados históricamente por hombres, como por ejemplo, este mismo deporte, la lucha olímpica.

¿QUÉ FALTA PARA QUE MÁS MUJERES SE SUMEN A ESTA DISCIPLINA?

Concluyó diciendo que quizá falta más promoción al deporte, más información. “Hoy en día hay muchísimas mujeres practicando artes marciales, es cuestión de interés, que las mujeres quieran y que se informen correctamente sobre la disciplina”.