La cúrcuma es una especia oriental muy utilizada en la gastronomía, ya que aporta además de un sabor increíble, un color y un aroma únicos. La cúrcuma posee múltiples beneficios para la salud gracias a sus propiedades nutricionales, antiinflamatorias, antioxidantes, antibacterianas y digestivas.
De entre todas sus bondades, se destacan las siguientes: mejora la digestión, facilita la pérdida de peso, combate resfriados y gripes, evita la crisis del asma, desintoxica el hígado y trata sus problemas, regula la flora intestinal, estimula el sistema inmune y alivia la inflamación en la piel (eccemas, acné o psoriasis).
Gracias a todos estos beneficios, la cúrcuma es una excelente aliada para tratamientos de enfermedades como la diabetes, el colesterol alto, las úlceras gástricas o el cáncer. Es la reina de las especias porque contiene fibra dietética, vitaminas C, E y K, niacina, sodio, calcio, potasio, cobre, magnesio, hierro y zinc.
Asimismo, esta especia funciona como un antidepresivo natural, ya que desde hace miles de años, la medicina tradicional china la usa para tratar la depresión, la tristeza y la infelicidad. El extracto de cúrcuma, o la cúrcuma en polvo, estimula el sistema nervioso, activa el sistema inmunitario y despierta el estado de ánimo. Es ideal para reducir los niveles de estrés, ya que produce el aumento de la serotonina, la tan famosa “hormona de la felicidad”.