Por Carlos Giménez.
“¡17, jugana!”, grita un espectador colombiano desde las gradas del estadio de Olimpia, donde el sol daría de pleno si no fuera por un puñado de nubes. Es lunes, se juega una semifinal de Conmebol Libertadores Femenina en Asunción; y los nombres de las jugadoras son desconocidos para la treintena de asistentes.
El mismo hincha colombiano, de nombre Fabián, se encarga de repartir globos blancos y rojos, y va tiñendo a la concurrencia como “barrabrava” de Las leonas, el equipo del Club Independiente Santa Fe. Sumado a la larga bandera que reza: “Vamos Leonas, Asunción”, se va contagiando el aliento para la albirroja colombiana.
Frente a Santa Fe juega Ferroviária, de Araraquara (São Paulo), nada menos que la última campeona de esta Libertadores, que el año pasado venció en Argentina a otro equipo colombiano, América de Cali, para coronarse con su segunda copa, desde que venciera en Colombia a Colo-Colo de Chile, en el año 2015.
Lea más: Pfizer pide a Brasil autorizar su vacuna para niños de 5 a 11 años
En el arranque, Ferroviária mantiene la pelota principalmente en territorio de Las leonas de Santa Fe, que pareciera no presionar lo suficiente. Pronto, la guardameta albirroja, Katherine Tapia, alcanza un primer pelotazo del rival granate con destino a uno de los ángulos del arco.
“Buena, Neymar”, comenta Fabián, en voz alta, ante un roce en mediocampo, donde la árbitra favorece a Ferroviária. El hincha colombiano y su esposa llevan cinco años viviendo en el país, en San Lorenzo; y están acompañados por otra pareja amiga, que llegaron hace apenas tres semanas.
El cuarteto bogotano rompe el silencio en las graderías, donde se van sumando otros pocos asistentes. Los amigos de Fabián no paran de alentar y repasar cánticos, tentando a quedar afónicos al día siguiente. Saludan amistosamente a otro grupo familiar, que indica ser también de la comunidad colombiana local.
Lea más: Alexander Lukashenko, el imprevisible autócrata que irrita a Europa
Hacia los 42 minutos, una incursión al fondo de la cocina de Ferroviária ilusiona a los parceros: se pita penal, y el penal se traduce en el primer gol de la tarde, ejecutado por Gisela Robledo. Se agregan 2 minutos más, Las leonas siguen en área de las brasileñas y queda la impresión de que si se decidían podían haber encontrado el segundo tanto antes del descanso.
La pasión por Santa Fe lleva años sin encontrar alegrías en la Libertadores masculina, comenta Fabián, por lo que esta oportunidad de alentar a Las leonas en Asunción era una oportunidad imperdible. Así como Olimpia y Cerro, compara, cuando sus equipos juegan en básquetbol o futsal, la camiseta es la que late. “Ojalá”, suspira, soñando con alcanzar una final.
“A la 6 su cordón se le desató. Ni cuenta se da”, menciona una señora, junto a dos señoritas que parecen militar en el fútbol femenino local (hablan del tema). Está en marcha el tiempo complementario; el juego mantiene su ritmo enérgico de ida y vuelta, con algunos roces, gritos, todas las emociones comunes a los partidos masculinos.
Lea más: Deforestación de la Amazonía brasileña alcanza récord para octubre
“¡Gran 7!”, se exaspera una muchacha, sentada con tres amigas, ante una falla en el ataque de Ferroviária. La pelota se equilibra en media cancha, aunque las brasileñas buscan pisar el acelerador con cuidado, porque Las leonas encuentran espacios para las corridas. Así, a los 18 minutos, ya con el ocaso del sol finiquitado, la arquera brasileña Luciana acalla un grito de sol, pero reactiva a la hinchada colombiana, ya con la voz enronquecida.
Llegamos a la media hora de juego, surge un tiro libre comprometedor a favor de las chicas granate. Cinco pájaros negros se posan sobre el césped cerca del área de córner, desapercibidos. “¡Qué golazo!”, celebra un hombre mayor, que interrumpe el intercambio de audios, ante la obra maestra de Rafa Mineira, que empareja las expectativas.
Hacia los 41 minutos, Katherine Tapia pide que su defensa no cometa faltas ante otro embate de Ferroviária; un inesperado tiro en comba casi la sorprende, retrocede y en el último instante de su caída manotea la pelota, dudando si calculó correctamente: la pelota roza el poste hacia afuera.
Lea más: Presidente del BID alerta sobre ingreso de empresas chinas en Latinoamérica
Ya con el tiempo cumplido, se anuncian cuatro minutos de adición. Ferroviária sigue presionando y encuentra espacios por la banda izquierda, pero no logra capitalizar tensos momentos en que las delanteras granates alcanzaron el área chica de Las Leonas; que, paciente, aguardaba una contra letal, que no llega porque el pitazo final anuncia definición por penales.
El arco elegido es el que se encuentra hacia la avenida España. El selecto público reacciona un poco fastidiado, ya que obliga a la mudanza hacia la parte menos habitada de las gradas. No obstante, esta situación sirve para rejuntar a la hinchada improvisada que se volvió simpatizante de Las leonas.
Lea más: Reino Unido amplía programa de tercera dosis de vacuna anti-COVID a mayores de 40 años
“Fuera, fuera”, es el mantra para que Ferroviária falle. Para cuando Santa Fe alcanza una ventaja de 3 contra 2, su arquera Katherine eleva su figura en la crónica con una tapada de oro al chute de Monalisa. En el siguiente combo, la colombiana Diana Celis sacude las redes clavando el balón por el techo del arco, y deja las chances electrizadas.
Raquel toma la enorme mochila a sus espaldas, contempla las opciones de 16 pasos que tiene ante sí, da cuatro de ellos y su tiro vence a la arquera colombiana, sin embargo, la pelota pega lánguidamente a mitad del poste izquierdo. Eufórica, Katherine salta del suelo y corre a estrecharse contra una ola de abrazos con que vienen a atropellarla sus compañeras.
Sí, esta es la primera final de Las leonas, y la instancia más elevada que han alcanzan en las 13 ediciones que llevan las Libertadores Femenina desde 2009. “Muchas gracias, Santa Fe, muchas gracias”, corea la ruidosa micro barrabrava; y las jugadoras se acerca a saludar y compartir la alegría. “¡Aguije!”, gracias en guaraní, se escucha pronunciar a Yisela Cuesta, ella es la número 17.
Por el tercer lugar, en Asunción
El club colombiano jugará la final el próximo domingo 21 de noviembre, a las 20:00, en el estadio Gran Parque Central en Montevideo, Uruguay. Las leonas se las verán con Corinthians, que este martes aplastó 8 a 0 al uruguayo Nacional, también en cancha del Olimpia, pese a la jornada de aguacero.
El equipo paulista va por su tercera copa, tras las conquistas en Paraguay 2017 y Ecuador 2019; que, de concretarlo, igualará a San José (São Paulo), que más veces logró inscribirse esta estrella en su logo. Los clubes brasileños ganaron esta competencia en nueve ocasiones.
Lea más: Dinavisa analiza uso de píldora anti-COVID ante pedido de tres laboratorios nacionales
Vale acotar que Uruguay se convertirá en el epicentro del fútbol sudamericano, ya que además de la final de la Libertadores Femenina, la final de la Sudamericana será en dicho país, este sábado 20 de noviembre, a las 17:00, entre Paranaense y Bragantino. Mientras que el sábado 27 de noviembre, a las 17:00, Palmeiras y Flamengo cerrarán por todo lo alto la Libertadores masculina.
Pero antes, Ferroviária y Nacional se pulsearán por el tercer lugar, y lo harán este jueves 18 de noviembre, a las 17:30, en el estadio Arsenio Erico, la cancha del Club Nacional en el barrio Obrero de Asunción. ¡Hay entrada gratuita! A través de Red UTS se pueden adquirir invitaciones digitales, y solo requiere Carnet del Hincha Seguro (Carnet Verde), para quienes tienen ambas vacunas anti-COVID. Además, se transmite en vivo por Facebook: @CopaLibertadores.
Paraguay en la copa de mujeres
¿Es importante la Conmebol Libertadores Femenina? Junto a la Liga de Campeones Femenina de la UEFA son las únicas dos competencias entre clubes femeninos a nivel continental en el mundo. Y compiten los clubes más grandes de la región, con jugadoras profesionales.
Paraguay ya fue sede de este evento en 2017, la novena edición, cuando se consagró Corinthians de manera invicta, tras un empate a cero con Colo Colo de Chile, y victoria de 5-4 en penales. En la presente edición, Paraguay tuvo dos representantes, Cerro Porteño y Deportivo Capiatá.
En Uruguay 2016, Sportivo Limpeño se convirtió en el primer campeón paraguayo, cuando le ganó 2-1 a Estudiantes de Guárico (Venezuela). Otro equipo femenino guaraní, UAA (Universidad Autónoma de Asunción), se convirtió en subcampeón ante Santos, en la primera edición de esta Libertadores, que tuvo por sede a Brasil en 2009. Además, Cerro Porteño alcanzó el tercer lugar en Brasil 2014, ante Medellín Formas Íntimas (Colombia); y el cuarto lugar en Paraguay 2017 y Ecuador 2019.