De las bolsas de resistencia a los talibanes que se formaron en Afganistán tras la toma de Kabul, la más importante es la que se sitúa en el valle del Panshir, al noreste de la capital.

La defensa de este bastión se organiza en torno al Frente Nacional de Resistencia (FNR), liderado por Ahmad Masud, hijo del famoso comandante Masud (asesinado por Al Qaeda en 2001), y por Amrulá Salé, vicepresidente del anterior gobierno.

Formado por milicias antitalibanas y por antiguos miembros de las fuerzas de seguridad afganas, el FNR juró resistir ante los talibanes. Sin embargo, ambas partes declararon querer resolver esta situación negociando, aunque de momento no se han producido avances en este sentido.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

¿Por qué es importante el valle del Panshir?

El Panshir es un bastión antitalibán desde hace décadas. Estrecho e inaccesible, las altas cumbres de la cadena de montañas del Hindú Kush lo aíslan de Kabul, que se encuentra apenas a 80 kilómetros al sur.

El valle tiene pocos accesos naturales y desde el punto de vista militar su geografía es una ventaja natural: se puede mantener a raya a los atacantes desde posiciones elevadas.

Además, su valor simbólico en Afganistán es muy alto, desde hace más de un siglo resiste a todas las invasiones. La resistencia del valle, habitado sobre todo por tayikos, influyó notablemente en el paisaje político y en la seguridad de Afganistán en los años 80 y 90.

¿Quién le dio esta fama?

La figura más venerada en el Panshir es el legendario comandante Ahmed Shá Masud, cuyo rostro decora murales y carteles no solo en el valle, sino en muchas otras partes de Afganistán. Apodado como “el León del Panshir”, Masud se hizo famoso durante la resistencia contra los soviéticos en los años 80.

La Unión Soviética lanzó numerosas ofensivas con miles de soldados, helicópteros y carros de combate sin llegar a doblegar a Masud, en las que fueron algunas de las batallas más sangrientas del conflicto. En los años 90 siguió obteniendo victorias, esta vez frente a los talibanes, que se habían hecho con el control de buena parte del país.

Aunque las fuerzas de Masud sufrieron sus peores bajas en esta lucha, los fundamentalistas islámicos nunca consiguieron controlar el valle. Finalmente, kamikazes de Al Qaeda que se hicieron pasar por periodistas asesinaron a Masud el 9 de septiembre de 2001.

¿Quiénes forman la resistencia hoy en día?

Los luchadores antitalibanes de hoy en día proceden tanto de las milicias locales como de antiguos miembros de las fuerzas de seguridad afganas que se refugiaron en el valle ante el avance de los fundamentalistas.

Se llevaron consigo su equipamiento, vehículos y armas, que completan las reservas de armamento y munición creadas por el Frente Nacional de Resistencia (FNR).

Ahmad Masud llamó a la resistencia del Panshir, pero pidió ayuda internacional, en concreto de armas y municiones a Estados Unidos, en una tribuna publicada en el Washington Post. El antiguo vicepresidente afgano Amrulá Salé, enemigo declarado de los talibanes, se refugió también en el Panshir.

¿Qué han hecho los talibanes?

Los talibanes enviaron a cientos de hombres a las zonas cercanas al Panshir y anunciaron el lunes que tienen rodeados a los milicianos del FNR, pero añadieron que prefieren negociar a combatir.

El FNR, por su parte, dijo que estaba preparado para resistir las ofensivas talibanas, pero también a negociar con ellos la formación de un gobierno representativo. Sin embargo, no hubo avances en este sentido.

Los talibanes afirman controlar al menos tres zonas en torno al Panshir. Amrulá Salé alertó en Twitter de un inminente desastre humanitario porque los talibanes no permiten el abastecimiento de comida y gasolina al valle. Aunque el FNR juró resistir, no está claro que puedan soportar un asedio prolongado si se les priva de comida, suministros y municiones.

Líder de la resistencia promete “no rendirse”

El líder de un movimiento de resistencia a los talibanes ha prometido no rendirse nunca, pero está abierto a negociar con los nuevos gobernantes de Afganistán, según una entrevista publicada por la revista Paris Match.

Ahmad Masud, hijo del legendario comandante rebelde afgano Ahmad Shá Masud, se ha retirado a su valle natal de Panjshir, al norte de Kabul, junto con el ex vicepresidente Amrullah Saleh. “Prefiero morir que rendirme”, dijo Masud al filósofo francés Bernard-Henri Lévy en su primera entrevista desde que los talibanes tomaron Kabul.

Lea más: Escritora chilena Diamela Eltit gana premio FIL de Literatura 2021

“Soy el hijo de Ahmad Shá Masud. La rendición no es una palabra que hace parte de mi vocabulario”, agregó. Masud afirmó que “miles” de hombres se estaban uniendo a su Frente de Resistencia Nacional (NRF) en el valle de Panjshir, que nunca fue capturado por las fuerzas invasoras soviéticas en 1979 ni por los talibanes durante su primer periodo en el poder, entre 1996 y 2001.

Renovó su petición de apoyo a los líderes extranjeros, incluido el presidente francés Emmanuel Macron, y expresó su amargura por el hecho de que se les haya negado armas poco antes de la caída de Kabul a principios de este mes.

Lea más: Comunidad de inteligencia de EEUU concluye que el coronavirus no fue diseñado como arma biológica

“No puedo olvidar el error histórico cometido por aquellos a los que pedí armas hace apenas ocho días en Kabul”, dijo Masud, según una transcripción de la entrevista publicada en francés. “Se negaron. Y esas armas -artillería, helicópteros, tanques de fabricación estadounidense- están hoy en manos de los talibanes”, dijo.

Masud añadió que estaba abierto a hablar con los talibanes y expuso las líneas generales de un posible acuerdo. “Podemos hablar. En todas las guerras hay conversaciones. Y mi padre siempre habló con sus enemigos”, dijo.

Lea más: Estados Unidos ataca con dron al Estado Islámico en Afganistán

“Imaginemos que los talibanes acepten respetar los derechos de las mujeres, de las minorías, la democracia, los principios de una sociedad abierta”, añadió. “¿Por qué no intentar explicarles que estos principios beneficiarían a todos los afganos, incluidos ellos?”, preguntó.

El padre de Masud, que tenía estrechos vínculos con París y Occidente, fue apodado el “León de Panjshir” por su papel en la lucha contra la ocupación soviética de Afganistán en los años 80 y el régimen talibán en los 90. Fue asesinado por Al Qaida dos días antes de los atentados del 11 de septiembre de 2001.

Fuente: AFP.

Déjanos tus comentarios en Voiz