- Por Nadia Denis
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Uno de los problemas agudos que persiste en el Chaco paraguayo es la falta de agua y, en esa materia, hubo mucho trabajo en todo el 2024, no obstante, también fue un año donde se dieron grandes avances y se iniciaron proyectos con impacto en el ámbito educativo, de la agricultura y también en lo económico, afirmó el gobernador de Boquerón, Harold Bergen.
“Este año fue muy movido, con muchas novedades y cambios, grandes proyectos que empezaron, como Hambre Cero, también muchos cambios institucionales, fue un año bendecido con mucho trabajo, tuvimos muy buen apoyo del Gobierno central y de los ministros”, expuso Bergen a La Nación/Nación Media.
El jefe departamental indicó que, en cuanto al agua, hubo una gran necesidad sobre todo en las comunidades indígenas y las zonas más alejadas de las zonas urbanas del departamento de Boquerón, lo que obligó a un trabajo organizado entre varias instituciones, como la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap), el Ministerio de Defensa Nacional, entre otras entidades del Estado.
“Muchas veces se dieron situaciones muy críticas cuando no había más reserva de agua”, lamentó y manifestó que esto los llevó a reactivar la Corporación Agua para el Chaco, la que fue fundada en 2005, pero dejó de operar por varios años. Mediante esta organización, los tres gobernadores del Chaco, junto con Presidente Hayes y Alto Paraguay, se unieron para enfrentar problemas comunes como la sequía, falta de agua, necesidades en los pueblos originarios y falta de caminos.