El presidente de la República, Santiago Peña, destacó ayer jueves el paso muy impor­tante que dio su gobierno en la protección de los niños con la promulgación de una reforma del Código Penal, que endurece las sanciones, de entre 15 a 20 años de cár­cel, hasta 30 años, y tipifica agresiones en los casos de abuso sexual infantil.

El mandatario señaló que con esto se manifiesta “un mensaje claro: en Paraguay, la violencia contra nuestros niños no será tolerada bajo ninguna circunstancia”.

“Un tema que nos toca el corazón de todos, que no podemos permitirnos de ninguna manera, bajo nin­guna circunstancia que­darnos simplemente con los brazos cruzados, y esa razón son nuestros niños, nuestras niñas, esas perso­nas tan especiales que tene­mos que proteger con todo lo que tenemos a nuestro alcance y unidos como una muralla viva para que nadie les pueda hacer daño. Ellos esperan eso de nosotros y no les podemos fallar”, expresó el presidente en una confe­rencia de prensa, tras oficia­lizar la modificación de los artículos 128 y 135 de Código Penal.

El mandatario recordó que este tipo de crímenes no con­taba con penas severas, lo que calificó como una situa­ción vergonzosa. “A nuestros niños y niñas no se les toca, y quien ose hacerlo desde hoy va a pagar muy, pero muy caro. Históricamente las leyes de protección contra el abuso sexual infantil en Paraguay contemplaban penas muy blandas, en un momento el abigeo tenía una pena mayor que el abuso de un niño, una situación intolerable y ver­gonzosa”, sentenció.

El presidente destacó que, con esta nueva normativa, “el Para­guay revierte esta situación y se convierte en el país con mayo­res penas para abusadores, en toda la región; además, estas modificaciones legislativas no se limitan solo a un aumento de penas, introduce también cambios profundos en nues­tro Código Penal, desde defi­nir conceptos, estableciendo sanciones más severas para quienes atenten contra la integridad de nuestros niños y niñas”, puntualizó.

Peña señaló que se unieron los esfuerzos entre todos los pode­res del Estado para lograr esta nueva sanción penal a los abusadores, una reforma que dará fuerza a la lucha con­tra el abuso sexual infantil. “Por eso unimos esfuerzos del Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo, el Poder Judi­cial, en una reforma legislativa trascendental, en la lucha que hemos iniciado contra el abuso sexual a niños y niñas, una reforma que nos da las armas para actuar con la mayor fuerza sobre aquellos que se atrevan a dañar a nuestros niños”, refirió.

Mencionó que el Gobierno tiene un objetivo claro, la pro­tección de los dos grupos más vulnerables, los adultos mayores, y los niños, niñas y adolescentes. “Hay dos grupos de personas a las que yo deseo proteger con todas mis fuer­zas, y ellos son nuestros adultos mayores y nuestros niños; si no logramos que ellos vivan mejor, que estén más segu­ros, vamos a fracasar como sociedad y eso es algo que no nos podemos permitir”, apuntó Peña.