La bajante del caudal de los ríos del país, sobre el todo el Paraguay y el Paraná, causa inquietud en la ciudadanía por el impacto que esta situación genera en la eco­nomía nacional, dependiente en gran medida del transporte de carga fluvial.

La incidencia de la cotización dólar, que marca una tendencia al alza, también es otro factor preponderante en la incidencia de nuestra economía.

En el programa “Fuego cru­zado”, emitido por el canal GEN/Nación Media, el econo­mista Jorge Garicoche de la con­sultora Mentu nos da una pers­pectiva de estas situaciones.

“Existen noticias positivas que se dieron en el cierre de la semana, bajó por fin el precio del combustible y la pregunta que quizás nos hacemos es si podrá sostenerse con todos estos factores mencionados”, refirió Garicoche.

Del programa también tomó parte Juan Olmedo, gerente general de Aduanas, que forma parte de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT).

Ante la consulta de cómo impactan en los precios fina­les al consumidor la histó­rica bajante del río Paraguay, lo que directamente afecta a la suba de los fletes de trans­porte, Garicoche explicó que efectivamente el pre­cio de los productos impor­tados escalan de manera más veloz que los nacionales.

“Eso no significa que los produc­tos nacionales no vayan a subir, porque muchos de los insumos de nuestros productos nacio­nales son de origen extranjero, por tanto en algún momento va a alcanzar también a nues­tros productos. De hecho ya se está sintiendo en el precio del flete, que se traslada al consu­midor final”, explicó Garicoche.

El consultor explicó que esto afecta también al empleo de personas en los rubros vincula­dos con la producción. “Si tene­mos una nómina de 100 perso­nas y nos vemos afectados por esta situación, voy a reducir la nómina de 100 a 80 para sal­var la situación”, ejemplificó.

Ante el encarecimiento de la cotización y de los fletes y si esta situación afecta a la recaudación de Aduanas, Olmedo señaló que es com­plicado hacer un contexto general y a la vez único del problema por las caracterís­ticas diferentes de los produc­tos, así como también consu­midores diferentes. “Dentro de la perspectiva tributaria sí va a impactar, aunque no demasiado por la demanda estable de algunos productos; pero al precio final, sí”, señaló Olmedo.

El gerente de Aduanas señaló que “en materia tributaria se genera un fraccionamiento o diferimiento del pago en el tiempo, porque los lotes de mercaderías se trasladan de manera diferente”.