Desde este lunes 5 de agosto entra en vigencia la primera fase de Hambre Cero en las Escuelas y está previsto que para el 2025 el programa llegue al 100 % de las instituciones educativas. Para este fin de semana, Alto Paraná encabeza una serie de obras para poner en condiciones las instalaciones donde los niños recibirán la alimentación escolar.
“La inauguración fue gracias a un trabajo coordinado que hicimos con la intendencia de Hernandarias y pudimos habilitar cocina-comedor, también lo hicimos en el municipio de Minga Guazú y van a ser utilizados en la segunda etapa del programa Hambre Cero que va a abarcar los 22 distritos de Alto Paraná”, explicó el gobernador César “Landy” Torres.
En comunicación con La Nación/Nación Media, el jefe departamental mencionó que todavía queda por delante mucho trabajo por hacer, dado que Alto Paraná tiene 500 instituciones educativas, de las cuales solo 85 cuentan con cocinas y comedores. La gobernación se hará cargo de la construcción en 15 escuelas, y también los municipios llevarán adelante obras de acuerdo a su disponibilidad presupuestaria.
“Hemos remitido un informe al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) describiendo la situación de todas las instituciones del departamento, no solamente en la cuestión de los comedores, sino también en la parte de agua potable, que también es algo que nos preocupa porque hay instituciones que no cuentan con ese servicio”, expuso.
Torres manifestó que una forma de completar las obras en las instituciones es mediante el respaldo de la Itaipú Binacional, que podría financiar ciertas construcciones y adecuaciones, ya que el presupuesto de los municipios y la gobernación es limitado. El gobernador advirtió que dado el déficit en infraestructura será imposible llegar a febrero del 2025 con el 100 % de las obras concluidas. No obstante, continuarán trabajando hasta poner en condiciones todas las escuelas.
Hambre Cero cuenta con dos modalidades, una de ellas es Cocinando en las Escuelas y la otra es por servicio de catering. En esta primera etapa, el 100 % de las instituciones educativas contarán con el primer sistema. Un aproximado de 21.000 niños de Itakyry, Ñacunday y Juan E. O’Leary serán los beneficiados en la primera fase del programa.