En su última evaluación realizada al Paraguay en julio de 2022, el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat) dejó algunas recomendaciones, entre ellas, un mayor control a las organizaciones sin fines de lucro.
Ante las controversias generadas en torno a la propuesta que establece el control, la transparencia y la rendición de cuentas de las organizaciones no gubernamentales (ONG), desde el Gobierno aclararon que la iniciativa parte tras una valoración y recomendación hecha por el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat), el cual analizó la situación de estas entidades en el Paraguay. La ley de control a las organizaciones civiles referente al uso que hacen de los recursos que reciben ya tiene media sanción en Cámara de Senadores y ahora debe debatirse en la instancia de Diputados.
Haciendo frente a los cuestionamientos que surgieron desde las oenegés, incluso de la Iglesia católica que pide posponer el tratamiento de la propuesta, el presidente de la República, Santiago Peña, hizo énfasis en la necesidad de una supervisión para prevenir lavado de activos en la administración de las organizaciones no gubernamentales.
El mandatario reveló que en la evaluación del Gafilat se había expuesto que las ONG también son mecanismos para el lavado de dinero, y por ello consideró que este tipo de organizaciones requieren de una diligencia ampliada, ya que inclusive hay muchas instituciones bancarias que tienden a no abrir cuentas a estas oenegés por la falta de transparencia en el origen de los fondos manejados.
Así también, el presidente del Congreso Nacional, Basilio “Bachi” Núñez, afirmó que el pedido de mayor control, partió desde la organización intergubernamental de base regional que agrupa a un total de 17 países de América del Sur, Centroamérica y América del Norte creado para prevenir y combatir el lavado de activos, financiamiento del terrorismo y el financiamiento de la proliferación de armas de destrucción masiva.
Según el último informe del año 2022, Gafilat había advertido en la tercera ronda de Evaluaciones Mutuas que Paraguay no contaba con suficientes leyes y reglamentos nacionales que se refieren a las organizaciones sin fines de lucro. (Punto 1 del Cuadro)
Tras la nueva evaluación hecha, Gafilat concluyó que “Paraguay ha evaluado los riesgos asociados a organizaciones sin fines de lucro e identificado al subsector de mayor riesgo y el sector, además de encontrarse como sujeto obligado, cuenta con su propia Evaluación Sectorial de Riesgos. Si bien destacan los esfuerzos para acercarse al sector, las capacitaciones que han realizado y las labores de monitoreo que se están implementando, se estima que, en particular en este aspecto de monitoreo, Paraguay encuentra un desafío importante para este sector por su extenso número de sujetos obligados” (Punto 2 del Cuadro)
En ese sentido, el grupo evaluador mencionó que Paraguay no tiene una base central de datos que posea la información completa del sector. Conforme a datos de la entonces SET, el registro de contribuyentes cuenta con 24.598 organizaciones de manera activa (al 19 octubre de 2020), excluyendo a las municipalidades y sociedades anónimas, el número se reduce a 21.352. (Punto 3 del Cuadro)
Por su parte, la Seprelad tiene registradas solo a 4.848 organizaciones, lo cual representa solo 23 % de las oenegés que están activas. Esta discrepancia, de no contar con un registro unificado, completo y actualizado, impide tener un conocimiento real del sector, ya que existe un 77 % de las organizaciones que no se tiene información alguna.
Del total, existe una diferencia material en dos categorías consideradas de vulnerabilidad alta: por un lado, una diferencia de 1.533 organizaciones de Servicio Social registradas solo en Tributación y no en Seprelad, por el otro, una diferencia de 1.619 en materia de Educación/Formación.
El equipo evaluador detalló además falencias en los controles de la Seprelad en la administración anterior, al no verificar que las oenegés realicen cruces de sus donantes y beneficiarios de los programas, y también por no aplicar sanciones por incumplimientos. (Punto 4 del Cuadro)
De conformidad con el registro de contribuyentes la mayoría de las organizaciones son corte gremial, sindical y colegiado (21,10 %) seguidas de los comités, juntas y similares (14, 68 %) y las dedicadas a fines sociales-salud, medioambientales o de investigación- (11,83 %). (Punto 5 del Cuadro)
Con base en un estudio sectorial realizado por la Seprelad en 2019, era muy alto el riesgo a que estas oenegés sean utilizadas en hechos de corrupción y lavado de activos. No obstante, el equipo evaluador valoró que Paraguay se encuentra desarrollando acciones para la revisión de las medidas, incluidas las leyes y regulaciones para evitar los abusos. (Punto 6 del Cuadro)
El Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica recomendó así al Paraguay que se modifique la legislación para las oenegés por altas probabilidades de lavado. Advirtió del riesgo que implica que este tipo de organizaciones sean utilizadas para otros fines. De ahí que se empezó a trabajar en la reglamentación que hasta hoy es incompleta, por lo que se requiere de una ley que está siendo objeto de debate actualmente.