Bob Menéndez, de 70 años, nacido en Nueva York de origen cubano, es congresista de EE. UU. por el Partido Demócrata desde el 2006. Su carrera polí­tica comenzó en 1973 y casi con seguridad ha terminado este año, tras ser declarado culpable de soborno y todos los demás cargos en su contra en el juicio federal por corrupción.

El influyente senador ha rea­lizado una política con fines de lucro, según acusa el fiscal del caso Damian Williams. En julio de 2022, Menéndez recibió a la entonces sena­dora abdista Lilian Sama­niego, enviada por el gobierno del expresidente Mario Abdo Benítez para conversar sobre corrupción y crimen organi­zado.

Una investigación de Nación Media reveló que para concre­tar este y otros encuentros, el oficialismo liderado por Abdo Benítez tuvo que abonar USD 7.500 a una consultora, espe­cialista en concreción de lob­bies de ese tipo.

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En junio de 2022, un mes antes del encuentro gestionado por la consultora, entre Menén­dez y Lilian Samaniego, los agentes del FBI encontraron USD 486.461 en efectivo meti­dos en bolsas y cajas durante un allanamiento en la casa de Englewood Cliffs del senador y su esposa, Nadine.

INFORMES PARA INFLUIR

A cambio de recibir lingotes de oro, dinero en efectivo y automóviles de lujo de parte de Wael Hana, un acaudalado inmigrante egipcio, Menéndez dirigió ayuda militar y armas a Egipto y dio información sobre el personal de la embajada de EE. UU. en El Cairo a funcio­narios de ese país.

También escribió una carta no firmada para que los funciona­rios egipcios pudieran influir a sus colegas del Senado y ayudó de otras maneras al Gobierno egipcio, otorgando a la empresa de Hana el monopolio de las importaciones de carne.

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