El ministro de Edu­cación y Ciencias, Luis Ramírez, deta­lló cómo se irá desarro­llando la distribución de la alimentación escolar una vez que entre en vigencia el proyecto de ley “Hambre cero en las escuelas” que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputa­dos. Indicó que con la crea­ción del Consejo Nacional de Alimentación Escolar (Conae) se podrá identifi­car y con ello tomar accio­nes en las regiones y zonas más vulnerables.

“El consejo se crea justa­mente para eso, para que pueda determinar cuá­les son las mejores opcio­nes para cada región y para cada zona. Las regiones y las zonas no tienen que ver con el concepto de los royal­ties, sino que ahora se va a hacer un privilegio de las zonas de pobreza y extrema pobreza, y cuando digo pri­vilegio quiero decir que se va a poner en primer lugar”, explicó en entrevista al pro­grama “Arriba hoy” de GEN y Universo 970 AM/Nación Media.

El secretario de Estado sos­tuvo que todo el espectro amplio que abarca la ali­mentación escolar como, por ejemplo, cuáles son los alimentos que deben ser distribuidos, la calidad de los mismos, las regiones, las zonas, quedarán a cargo del Conaes. “El consejo va a ser el encargado de gene­rar las reglas de juego, para que todo sea claro, transpa­rente y sobre todo posible”, señaló.

Agregó que existe todo un esquema de trabajo en torno los alimentos saluda­bles, pero también se deben garantizar otras situacio­nes, como el entorno lim­pio para la producción de los alimentos, que la cocina sea apropiada, también que los cocineros y cocineras sean personas preparadas. “Hay toda una red de situaciones que hay que tener en cuenta y ahí hay que tener una con­traloría mucho más fuerte”, apuntó.

Otro de los aspectos que se está trabajando desde el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) es la partici­pación de los propios padres de familias y tutores para el control de la calidad o la dis­tribución eficiente de los ali­mentos en las escuelas.

“Que los padres, los contra­lores, pueden estar efectiva y eficazmente en la escuela, mirando, sacando repor­tes, informando, también los alumnos, los directores. Le vamos a dar un nivel de con­trol a la comida diaria que puedan permitirnos tomar decisiones oportunas, que es el otro gran punto que tiene esta ley”, mencionó.

En el caso de que existan funcionarios o autoridades que no cumplan o se constaten irregularidades, el proyecto de ley tam­bién incluye, por primera vez, una fuerte sanción a los mismos. “Por primera vez, se pone la frase en unos de los artículos, para mí lo más importante es que aquel que intervenga en el ámbito de la alimentación y tenga un mal actuar responderá con su patrimonio”, resaltó.