La Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) expresó su pesar por lo que considera un “deterioro de la institucionalidad democrática”, luego de la pérdida de investidura a la que fue sometida la exsenadora Kattya González.
A través de un comunicado publicado ayer viernes, los obispos del Paraguay expresaron su posición luego de los últimos acontecimientos suscitados en el ámbito político, a raíz de la expulsión de Kattya González del Senado.
En el texto, la Conferencia Episcopal asegura “observar con dolor un proceso de deterioro de la institucionalidad democrática de nuestro país” que, con sus luces y sus sombras, se ha venido construyendo con esfuerzo en los últimos 35 años.
De igual manera, resalta la necesidad de “conducir las instituciones democráticas de la República con la altura moral y ética”, así como la idoneidad de sus miembros y el respeto de los procesos y procedimientos establecidos en el marco legal vigente. “Si en el cumplimiento de reglamentos se toman decisiones legítimas, esperamos que se apliquen con equidad en todos los espacios y en todos los casos, sin privilegios ni consideraciones de intereses particulares o de grupos”, reza el pronunciamiento de la CEP.