“Este es uno de los cambios más trascendentales que está experimentando el Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) desde su nacimiento y como explicaba el presidente la República, un punto de inflexión de esto es el informe de la Contraloría, un cuerpo independiente al Poder Ejecutivo, que hace un análisis objetivo y nos documenta de manera explícita y lapidaria lo que ha sido la implementación”, señaló Giménez.
Lamentablemente el Fonacide ha sido un “proyecto fallido”, manifestó Giménez y mencionó que todos los reportes periodísticos a través de los años han denunciado la mala utilización o la malversación de estos recursos que debían ser destinados para la alimentación escolar; sin embargo, la merienda y almuerzo solo han llegado al 5 % de los estudiantes.
“Hoy sabemos de manera documentada y en base a evidencias que los resultados no fueron los esperados, entonces no podemos hacer la vista gorda a lo que es la realidad. La Ley del Fonacide necesitaba ser revisada y justamente a eso nos abocamos con un equipo amplio de trabajo”, indicó a la 1080 AM.
El equipo técnico que diseñó este proyecto tuvo en cuenta las falencias y debilidades en la implementación de la adquisición y distribución de la alimentación escolar. A partir de esto se plantea esta iniciativa que busca que el Estado cumpla en su misión de atender a la niñez y adolescencia, especialmente la que se encuentra en situación de pobreza.