El presidente de la República, Santiago Peña, en compañía de la primera dama y una comi­tiva de sus ministros, man­tuvo en el transcurso de ayer un encuentro con la comu­nidad paraguaya radicada en los Estados Unidos, oca­sión en que compartió sus planes de gobierno e instó a los compatriotas a mante­nerse unidos, contribuyendo siempre por el bienestar del Paraguay.

“Como muchos de ustedes años atrás eran también un inmigrante paraguayo que salió de nuestro querido país con sueños, anhelos y la búsqueda de oportunida­des y afuera lo único que pen­saba era en nuestro querido Paraguay. Vengo a compar­tir y colocarme a disposición de ustedes, de escuchar sus pedidos, reclamos, sueños”, comentó.

El encuentro con los com­patriotas se desarrolló en la localidad de Washington D.C. “Hay una necesidad enorme de generar este diá­logo. Tendremos tres días intensos de varias reunio­nes con diversos represen­tantes del Congreso, las universidades, centros de investigación, la Cámara de Comercio Americana. Lle­varemos la voz del Paraguay al mundo. Washington es la capital política del mundo, que actualmente se encuen­tra complicado, gran parte de las acciones se toman desde acá; entonces, para nosotros es muy impor­tante venir a compartir”, comentó.

Peña puntualizó que durante los próximos cinco años se dedicará a generar las mejores condi­ciones en el Paraguay, para que aquellos compatrio­tas que quieran retornar encuentren calidad en las áreas de la salud, educa­ción y empleo.

“Para aquellos que toma­ron la decisión de quedarse en el exterior es demasiado importante mantener el vínculo con Paraguay, para que puedan com­partir inversión, conoci­mientos en los diferentes ámbitos en que se desempeñan. El gran desafío es ver cómo conectar a la diás­pora paraguaya. Un pedido que siempre hago en todos los lugares que visito donde me encuentro con los com­patriotas es la importan­cia de mantener la comuni­dad de paraguayos unida”, refirió.

Por otra parte, Peña com­partió con los compatriotas las posiciones que asumió el Gobierno en la política exte­rior respecto a las últimas dos grandes guerras desata­das, la primera entre Rusia y Ucrania y la otra generada el pasado 7 de octubre entre Israel y el grupo terrorista Hamás.