Ante la serie de denuncias en torno a las atenciones y las vivencias de los pacientes que se encuentran en el Hospital Psiquiátrico, la ministra de Salud Pública, María Teresa Barán, habló con La Nación/Nación Media de los trabajos que estarán desarrollando desde la cartera sanitaria para cambiar el modelo de atención del instituto, con el objetivo de rescatarlo del abandono y convertirlo en lo que debería ser realmente: un centro de contención y reinserción social.
“Vamos a cambiar la manera en que se viene atendiendo la salud mental en el país. Esta historia del Psiquiátrico no es una situación reciente, sino algo de toda la vida y que se fue arrastrando tras varias administraciones. Ahora quiero que aprovechemos la realidad desnudada del hospital, para generar oportunidades de transformación, en lo cual ya estamos trabajando”, comentó la doctora Barán a LN.
Desde el Ministerio de Salud se ordenó la intervención del Hospital Psiquiátrico, y como producto de este trabajo, se concluyó la necesidad de instalar un nuevo modelo de atención a las personas con enfermedades mentales en el país. Primeramente iniciaron con capacitaciones a los psiquiatras, empezando con Central, para ir gradualmente a los demás departamentos y así comenzar a desarrollar una atención más descentralizada.
“Además, cambiaremos el sistema de internación. Parámetros internacionales y científicos ya demostraron que los pacientes con enfermedades mentales no deben ser internados y retenidos. Tenemos que reconvertir el hospital para dar paso a un Centro de Urgencias Psiquiátricas, en el cual se trata la crisis del paciente y luego devolverlo a su familia, cumpliendo así con nuestro objetivo de reinsertarlos”, señaló la ministra.
HUMANIZAR LA ATENCIÓN
La titular de la cartera de Salud lamentó para La Nación/Nación Media la manera en que el Hospital Psiquiátrico pasó a convertirse en un centro en el cual se desecha a las personas con trastornos mentales, lo cual quedó como una terrible herencia entre cada administración. Para cambiar esa lacerante realidad, Barán habló de la importancia de apuntar a una atención más humanizada, observando a los pacientes como seres vivos que necesitan ser reincorporados en la sociedad. “Tenemos 130 pacientes en total que están viviendo en el Hospital Psiquiátrico. Hemos llegado a un extremo, arrastrado de años y años de postergación, pero decidimos elaborar cambios radicales. Como medida, dividimos a los pacientes internados por franja etaria, para derivarlos a diferentes centros asistenciales como el hogar Santo Domingo, en el caso de los adultos mayores, y el Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu, en el caso de los menores”, comentó la profesional médica.
MEJOR ATENCIÓN
La doctora Barán habló de otro de los objetivos a ser desarrollados en el Hospital Psiquiátrico, enfocado en el mejoramiento total de las capacidades y funcionalidades de los profesionales, para perfeccionar su nivel de respuesta a las necesidades de los pacientes. Recordó que lastimosamente en el país hay una cantidad muy reducida de médicos psiquiatras, por lo cual se apuntará a una capacitación constante de los profesionales para ampliar la capacidad de atención a la población.
“Todo el personal de cada Unidad de Salud Familiar a nivel nacional recibirá capacitaciones, para así dar respuesta en cada punto del país a las personas que requieran de una asistencia profesional. Además, queremos transformar la visión en torno al hospital, que ya no se lo observe como un lugar de depósito humano, sino como un centro de atención integral de todos los trastornos mentales”, expresó.