Luego de que la Cancillería Nacional haya convocado al embajador de los Estados Unidos, Marc Ostfield, sobre los documentos supuestamente filtrados de su gobierno, el presidente de la República, Santiago Peña, convocó a una conferencia de prensa y destacó que ha sido el camino correcto e institucional para aclarar las circunstancias.
No obstante, Peña indicó no estar de acuerdo con las menciones hacia él. “Me pareció una agresión personal como presidente de la República a una persona que ha sido electa por mandato popular, en un documento que en el caso que sea cierto creo que es una falta de respeto para un país que claramente ha manifestado estar en sintonía con los grandes desafíos a nivel global, la lucha contra la corrupción, la igualdad, el desarrollo”, comentó.
Tras el llamado a Ostfield por parte del ministro Ramírez, el diplomático norteamericano informó ante medios de comunicaciones digitados que la política de su gobierno no es aceptar ni negar la veracidad de los documentos, ante la consulta sobre el origen del supuesto documento filtrado a algunos medios.
El jefe de Estado señaló que, ante la falta de confirmación sobre la veracidad del contenido del documento por parte de los Estados Unidos, quedaron varias interrogantes. “Nunca sabremos realmente las motivaciones, pero sí esto provocó en nosotros una gran preocupación; por eso, el canciller Rubén Ramírez tomó la decisión de convocar inmediatamente al embajador norteamericano”, acotó.