Macarena Duarte, macarena.duarte@nacionmedia.com
El economista chileno Andrés Rebolledo Smitmans llegó a Paraguay en carácter de secretario ejecutivo de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade) para instalar diálogos en torno a las transiciones energéticas, apoyando al país en su fortalecimiento en materia energética. Trabajó en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile por más de 20 años y fue ministro de Energía en el segundo gobierno de Michelle Bachelet, entre 2016 y 2018.
Rebolledo fue electo en la LII Reunión de Ministros de Energía de América Latina y el Caribe, realizada en diciembre de 2022, como para el período 2023-2025 titular de Olade, que es un organismo de cooperación, coordinación y asesoría técnica, de carácter público intergubernamental, constituido el 2 de noviembre de 1973 mediante el Convenio de Lima, ratificado por 27 países de América Latina y el Caribe, con el objetivo de fomentar la integración, conservación, racional aprovechamiento, comercialización y defensa de los recursos energéticos de la región.
En conversación con La Nación/Nación Media, el experto en relaciones económicas internacionales y en el área de energía destacó los escenarios propicios en los cuales podría trabajar Paraguay para llevar a cabo un mejor aprovechamiento de su potencial energético, colocándose incluso como un actor participativo en la región.
–Con la coyuntura global actual, ¿qué tipo de oportunidades usted observa para la región sudamericana en materia energética?
–América Latina y el Caribe, en general, están en una posición muy interesante y expectante en torno a la transformación del sector energético en el mundo. Nuestra región es la más verde del mundo en términos de penetración y participación de energías renovables, tanto en su matriz primaria como en su matriz de generación eléctrica.
En cuanto a los desafíos, el punto de vista a la inserción en los distintos mercados globales, el hecho de tener estos rasgos genera muchas oportunidades para nuestra región a la hora de avanzar en cambios e incorporación de nuevas tecnologías. En este contexto, Paraguay es un país privilegiado desde el punto de vista de la penetración de energía renovable y esto le permite imaginarse un futuro de desarrollo económico con sello de competitividad muy importante.
–Dentro del proceso de transición energética, ¿podría llegar a considerarse a Paraguay como un actor clave, con el aprovechamiento de sus hidroeléctricas?
–En el caso particular de Paraguay, es el país con mayor penetración dentro de la región, como consecuencia de su riqueza y dotación hidro. Claramente, desde esa perspectiva, este país tiene una situación expectante dentro de su competitividad en el mundo, entendiendo que la estructura de las matrices de generación eléctrica serán durante los próximos años un atributo central a los efectos de atraer inversiones y participar en mercados internacionales.